Por Guillermo Pimentel Balderas

El presidente de la Central Campesina Independiente (CCI), Rafael Galindo Jaime, consideró que es un desastre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), por lo cual pidió formalmente al presidente Electo Enrique Peña Nieto, la cancelación de su capítulo agropecuario, pues “desde su entrada en vigor, en 1994, sólo ha dejado para el país 52 millones de pobres, más de 5 millones de desempleados, 12 millones de campesinos migrantes, 14 millones de ambulantes y 42% de importaciones de alimentos”.

Al presidir el 49 Pleno Agrario Nacional, ante funcionarios del Gobierno Federal encabezados por Ángel Sierra, Coordinador General del FONAES y representante del titular de Economía, Bruno Ferrari, el dirigente de la CCI dijo que la petición se hizo llegar en un documento a Peña Nieto.

Galindo Jaime, comentó que la petición seguramente propiciará señalamientos de funcionarios en el sentido de que “es una locura”, pero afirmó que “lo estamos pidiendo porque hay muchos intereses en el intercambio comercial entre Estados Unidos y México, donde los campesinos han quedado fuera de todo beneficio”, acotó.

Aseguró que los subsidios otorgados por los gobiernos de Estados Unidos y Canadá a sus productores, ha permitido dejar fuera de competencia a los campesinos mexicanos, de los cuales sólo el 4.5% recibe apoyos a través de programas o créditos.

“Lo que sí es una locura es que cada año haya un millón de pobres en México, es una locura que cada año aumente el comercio informal en México, porque no hay capacidad de crear empleo en el país”, recalcó,

El Presidente de la CCI reprochó la política del Presidente Felipe Calderón que sólo ayuda a los grandes agro empresarios que cuando mucho serán 300 mil; mientras que se desperdicia el potencial de los 30 mil Núcleos Agrarios que hay en el país en el que habitan 3.5 millones de ejidatarios.

Insistió en que desde la firma del TLCAN en 1994, la Secretaría de Economía se ha convertido en una agencia gestora de cupos de importación que sólo beneficia a los grandes intermediarios que, además, especulan con los  alimentos y establecen precios sin que Bruno Ferrari, titular de la dependencia, intervenga en la materia.

“El Secretario de Economía, Bruno Ferrari no regula los precios, permite la especulación de alimentos lo que da como resultado una actuación de esta dependencia como mediocre y, ejemplos, está la más reciente crisis del huevo que llegó a costar el kilogramo hasta en 104 pesos en La Paz, Baja California y en este momento no baja de 25 pesos”, resaltó.

Rafael Galindo Jaime, Presidente de la priista CCI, puntualizó que debe haber un cambio radical en la política para el agro nacional, pues es urgente frenar la pobreza en el medio rural, generar empleo, abatir el hambre y crear oportunidades para los jóvenes campesinos que emigran de sus comunidades en busca de mejor nivel de vida en ciudades urbanas o en Estados Unidos.