La presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, Gabriela Cuevas Barron, reconoció el trabajo que a nivel internacional se ha realizado para generar bases normativas que promuevan y protejan los derechos de los trabajadores del hogar. En particular se refirió al Convenio 189 de la OIT, adoptado en junio de 2011 y que tiene como objetivo garantizar a las y los trabajadores domésticos los mismos derechos que quienes trabajan en otra labor.

Refirió que el gobierno de México hace dos años votó a favor de adoptar este Convenio, y sería justo que el Ejecutivo Federal lo envíe al Senado para su eventual ratificación a fin de que se les empiecen a respetar derechos como el pago de aguinaldo, la prima vacacional, el seguro social, el pago de horas extras y el derecho a afiliarse a un sindicato.

Cuevas Barron señaló que en cumpliendo con su trabajo legislativo como Presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores y en acuerdo con las otras dos comisiones dictaminadoras, así como, al tener en cuenta que México es el segundo país de Latinoamérica en número de empleadas domésticas, aprobaron un dictamen que tiene como finalidad exhortar al Ejecutivo Federal para que se adhiera en nombre de los Estados Unidos Mexicanos al Convenio 189 de la Organización Internacional de Trabajo.

“No podemos postergar más este tema. Y la ratificación del Convenio 189 permitirá que el trabajo decente sea una realidad para los trabajadores domésticos”, dijo.

Gabriela Cuevas lamentó que todos los días estas personas enfrenten circunstancias adversas porque carecen de un sistema de protección eficaz.

"A diferencia del resto de los trabajadores, se les somete a excesivas jornadas de trabajo, sus días de descanso no están garantizados, se les pagan salarios poco dignos y no cuentan con cobertura de seguridad social",aseveró.

La legisladora federal subrayó que todos los senadores integrantes de las comisiones dictaminadoras coinciden en que es necesaria y conveniente la ratificación del Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo, sobre el trabajo decente para las trabajadoras y trabajadores domésticos.

“Este nuevo convenio de la OIT beneficiaría a miles de trabajadoras y trabajadores domésticos del mundo que se ocupan de las familias y los hogares, otorgándoles los mismos derechos básicos que otros trabajadores, incluyendo horas de trabajo razonables, descanso semanal de al menos 24 horas consecutivas, un límite a los pagos en especie, información clara sobre los términos y las condiciones de empleo, así como el respeto a los principios y derechos fundamentales en el trabajo, incluyendo los de libertad sindical y negociación colectiva”, concluyó la Presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores.