Por Guillermo Pimentel Balderas

Enrique Bonilla Rodríguez, fundador y coordinador del Frente Nacional contra Walmart, denunció, una vez más, que ninguna autoridad laboral del actual gobierno efectúa regularmente inspecciones para evitar la explotación de 69 mil “esclavos” dentro del monopolio que representa la empresa trasnacional, cantidad de 8 mil millones de pesos anuales.

El luchador social aseguró que Walmart no sólo lava, sino que también “plancha, cose y entrega a domicilio”. No podemos confiarnos de los líderes empresariales como tampoco de la mayoría de los políticos. El soborno de los ejecutivos de Walmart lo contemplan como un modelo para el crecimiento futuro y es la manera de hacer negocios en México; es una tradición cultural”, acusó.

Bonilla Rodríguez sugirió a todos los trabajadores del monopolio envíen respetuosamente al correo electrónico de Felipe Calderón Hinojosa (This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.), una solicitud de inspección laboral en cualquiera de las 2,400 tiendas o 600 sucursales bancarias que tiene Walmart en el país.

A través de un comunicado de prensa, el fundador y coordinador del Frente Nacional contra Walmart, explicó que el Congreso de Estados Unidos aprobó en el año de 1977 una  Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA), tipificando como delito a las corporaciones norteamericanas y sus subsidiarias el sobornar a funcionarios extranjeros y, que especialmente Walmart México, practica en nuestro país, con toda la impunidad existente, blindado este hecho al haber comprado a los políticos más altos como Felipe Calderón Hinojosa.

“En Estados Unidos exigen sus derechos y las autoridades los escuchan como en 2007, cuando el Departamento de Trabajo condenó al pago de casi 34 millones de dólares en salarios atrasados a 87,000 trabajadores”, subrayó.

Destacó que recientemente, también el Departamento de Trabajo ordenó pagar 4.8 millones de dólares en salarios caídos y daños a miles de trabajadores que se les había negado el pago de horas extraordinarias y muchísimos casos más.

“En conclusión, las leyes de Estados Unidos y de México han sido violadas y no debemos tolerar este incumplimiento”, advirtió.