La migración se disparó en una década
La migración de mexicanos hacia Estados Unidos en la búsqueda de mejores condiciones de vida, se incrementó considerablemente en la última década, calculándose que el número de connacionales radicados en el vecino país del norte pasó de 20.6 a 31.8 millones, refiere el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP) de la Cámara de Diputados.
No obstante, añade, la política migratoria reforzando las fronteras por medios físicos y policiales ha tenido como efecto inmediato el incremento del costo de los cruces a manos de los traficantes de personas y un aumento de muertes en la frontera y el número de deportados.
“El endurecimiento de las políticas migratorias en Estados Unidos, iniciado desde 1994 con la construcción de una barda entre Tijuana y San Diego, ampliada después de los atentados de septiembre de 2001, ha dificultado el tránsito hacia la Unión Americana”, subraya.
El estudio difundido por Cámara de Diputados menciona que al igual que los trabajadores migrantes mexicanos en Estados Unidos, los de Centro y Sudamérica, en su tránsito por nuestro territorio hacia el vecino país del norte, enfrentan una situación de vulnerabilidad hacia sus derechos humanos, pese a las reformas impulsadas por el Congreso.
Señala que a pesar de que la ley garantiza los derechos humanos de los extranjeros durante su estancia y tránsito en el territorio nacional, “los hallazgos de fosas con cadáveres de migrantes indocumentados encontradas en los últimos años, parecen poner en entredicho tales garantías”.
Agrega que de acuerdo con la Tercera Encuesta Nacional sobre Migración del CESOP, un alto porcentaje de entrevistados coincide en que a los mexicanos en Estados Unidos no se les respetan sus derechos, pero tampoco a los migrantes de Centro y Sudamérica que transitan por nuestro país.
La mayoría de los mexicanos entrevistados señala que estos migrantes son altamente discriminados a su llegada al país y explotados laboralmente. A pesar de ello, un alto porcentaje consideró que la migración es un problema grave para el país y que es peligrosa, de forma paralela al aumento de inseguridad.
Otro 10 por ciento opina que los migrantes indocumentados centroamericanos no deben tener derechos laborales, y que los servicios de salud y educación representa un costo que perjudica a los mexicanos.Por otra parte, añade que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ha considerado que los migrantes son víctimas de violaciones a sus derechos, porque su carácter de indocumentado los expone a un sinnúmero de vejaciones, ya sea por la delincuencia organizada o por servidores públicos, a lo que se suma un limitado o nulo acceso a los derechos sociales y económicos en sus países de origen que los obliga a migrar.
Menciona que diversos reportajes, así como documentales e informes de la CNDH han advertido respecto de los riesgos que enfrentan los centroamericanos ilegales que cruzan el territorio nacional en su intento por llegar a Estados Unidos.
En este sentido, señala el CESOP que su encuesta revela que la percepción de que este tránsito es peligroso para los migrantes centro y sudamericanos ha aumentado en los últimos años.
“Mientras que en 2007 poco más de 6 de cada 10 pensaba que este recorrido era riesgoso, cuatro años después, en 2011, la opinión aumentó 20 puntos. En 2011, para 8 de cada 10 personas el tránsito de los centroamericanos por el territorio nacional era arriesgado”.
El estudio concluye que de acuerdo con un informe del Centro de Estudios Migratorios del Instituto Nacional de Migración, el tránsito irregular de centroamericanos por nuestro país, con la finalidad de llegar a Estados Unidos, cobró mayor importancia durante la década de los ochenta, cuando tuvieron lugar conflictos políticos y armados en la región.
Destaca que por nuestro territorio cruzan cada año 140 mil personas procedentes de Centro y Sudamérica; entre un 92 y 95 por ciento provienen de Guatemala, Honduras, El Salvador y Nicaragua.
“Se calcula que durante el periodo de 1995 al año 2000, un millón 336 mil centroamericanos cruzaron el territorio mexicano en su paso hacia Estados Unidos; un millón 43 mil en el periodo 2001 a 2005 y 990 mil durante 2006-2010”, concluye.