Antiguamente se oía el refrán "La calabaza ni engorda ni embaraza, sólo aumenta la tripaza", aunque en la actualidad se oyen más cosas como "La sandía no engorda", siendo ambas cosas falsas, pues la calabaza aporta 30 kilocalorías por 100 gramos y la sandía 22. Otra cosa es que un alimento tenga un contenido calórico menor que otros con los que se compara.

El pomelo es el clásico ejemplo de alimento famoso por su poder adelgazante. Al zumo de pomelo al igual que al del limón se les ha supuesto un efecto destructor de la grasa al ser ácido, pero lo que llevan es ácido cítrico y no ácido sulfúrico o clorhídrico que sí destruirían la grasa (junto con el resto de los tejidos, por supuesto). Se llegó a crear la llamada "dieta del pomelo", que resultó ser un truco publicitario para relanzar las ventas de los excedentes de la cosecha de pomelos (hay que decir que los cosecheros tuvieron un éxito total en sus aspiraciones). 

" La lecitina aumenta el apetito de los niños" . Se supone que la lecitina tiene el poder de romper la grasa en pequeñas gotitas, facilitando así la eliminación del exceso, aunque curiosamente también se vende para los niños aduciendo que aumenta el apetito y proporciona energía. La lecitina es una combinación de grasas del tipo de los fosfoglicéridos que forma parte de las estructuras celulares del organismo, ayuda a absorber las grasas de los alimentos y facilita su transporte en la sangre; normalmente se toma de forma abundante en nuestra dieta (huevos, leche, hígado, aceites vegetales...) no siendo necesario un ingreso especial de la misma, ya que entonces sólo servirá como una fuente extra de calorías.

"El fumar no tiene relación con el peso".Hay personas que se resisten a dejar de fumar porque temen ganar peso con el intento. Al dejar de fumar puede producirse un aumento de peso que suele oscilar entre tres y diez kilos. El tabaco, en concreto la nicotina, tiene poder anorexígeno (disminuye la sensación de hambre) y estimula la secreción de adrenalina. Estos dos mecanismos ayudan a regular el peso, a través de una reducción de la ingesta. Al dejar de fumar, además, se produce un estado de ansiedad, producido por la privación de la nicotina y por el cambio de hábito, que muchas personas intentan aliviar comiendo más, sobre todo alimentos ricos en hidratos de carbono. Investigadores del Departamento de Medicina del Karolinska Institute de Suecia han demostrado que el tratamiento antitabaco basado en nicotina permite mantener el peso bajo control. Los científicos administraron la nicotina en dosis similares a las encontradas en los cigarrillos (infusiones de 0,5 mg/kg/min) a un grupo de personas sanas y comprobaron que la nicotina sistémica estimulaba la liberación de adrenalina, probablemente de las glándulas adrenales, y la activación de los receptores de la nicotina en el tejido adiposo.

Según el doctor Kurt Anderson, uno de los autores del trabajo, "este efecto de la nicotina podría explicar por qué los fumadores ganan peso cuando dejan el hábito del tabaco y puede suponer un nuevo acercamiento al desarrollo de fármacos contra la obesidad".

"Las Bebidas "light" adelgazan".

Las bebidas bajas en calorías estimulan el apetito, según un estudio en el que se analizó el efecto que tienen sobre la ingesta este tipo de bebidas artificialmente azucaradas para apagar la sed. El resultado fue que los individuos que tomaron estas bebidas comían más que los que tomaban simplemente agua o bebidas azucaradas de forma natural. Sumando la energía contenida en las bebidas y la de las comidas ingeridas después, resultó que las bebidas azucaradas artificialmente no suponían ningún beneficio comparadas con las bebidas altas en calorías, y ambas eran peores que el agua. Los autores del estudio, que se realizó en el Biopsychology Group de la Leeds University, en el Reino Unido, creen que estos resultados podrían servir para entender la relación entre la actividad física y las bebidas en el control del apetito.

" El té  como adelgazante”. Este es un fenómeno que resurge cada cierto tiempo de sus propias cenizas. Surge y se promociona como adelgazante hasta que es prohibido o retirado del mercado. El té aporta teína, sustancia similar a la cafeína del café o a la teobromina del cacao; este tipo de sustancias actúan en la lipólisis o destrucción de la grasa...... efecto que se ha comprobado "in vitro" pero nunca demostrado "in vivo".

"Existen  tratamientos mágicos para adelgazar"  Los obesos  al imaginarse una vida llena de privaciones hasta el fin de sus días, no dudan en acercarse a todo tipo de soluciones, la mayoría de las veces sin cuestionarse la seriedad o validez de los métodos. Aquí hay que distinguir entre la magia clásica y la moderna:

La magia clásica nos ofrece una serie de amuletos,  plantillas, pulseras, pendientes y parafernalia similar, que todavía pueden verse ofertados por dudosos anuncios de revistas populares; hoy en día están muy desprestigiados, por lo que se han dirigido hacia problemas más subjetivos como el dolor o el vigor sexual.

La magia moderna nos presenta máquinas especiales, prendas de vestir, geles maravillosos o píldoras milagrosas que prometen todo lo que no se debe prometer. Especialmente peligrosas son las "pastillas de fórmula" (explosivos cócteles de diuréticos, laxantes, anfetaminas, hormonas tiroideas, tranquilizantes y otras muy variadas y, en general, inútiles sustancias).

La ayuda celestial: Curiosamente no existe ningún ángel, arcángel, santo, santa o virgen que se dedique desde las alturas celestiales a prestar su apoyo a la curación de la obesidad; no existen rogativas, santuarios, procesiones o romerías para este problema. Esto es debido principalmente a que la obesidad se sigue viendo como un castigo por la gula o la vida desordenada, y por la sensación de culpabilidad originada por la falta de fuerza de voluntad.