Acusan al senador Monreal
Líder del sindicato mayoritario del Senado de la República logró raudo ascenso para convertirse en magistrada del Tribunal de Justicia y el restaurante más amplio y jugoso que funciona al interior del órgano parlamentario, fue otorgado en concesión de manera irregular.
Por estos dos asuntos, revelaron trabajadores del Senado, el presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal Ávila, podría ser llamado a cuentas, pues afirman que está documentado que ambos asuntos los manejó el legislador del partido Morena a su arbitrio y conveniencia personal, lo mismo que otros que nada tienen que ver con la funcionalidad del parlamento.
De acuerdo con la información proporcionada a los sabuesos de esta Grilla en el Poder, la eterna dirigente sindical, Bertha Orozco Márquez, aceptó trabajar junto a Monreal desde la 64 y lo que va de la 65 Legislatura, con el propósito de lograr beneficios mutuos.
Así fue como la líder laboral escaló con el apoyo del senador, hasta llegar al cargo de magistrada, pero sin dejar de controlar el organismo de los trabajadores, ya que el cargo de liderazgo se encuentra acéfalo desde hace casi un año, con la complacencia de la presidencia de la Junta de Coordinación Política.
El otro asunto grave es la concesión del restaurante ubicado en el cuarto piso del edificio senatorial, negocio que fue otorgado el yerno del mismo Ricardo Monreal, pasando por la autoridad de la presidenta del Senado de la República, Olga Sánchez Cordero, a quien manipula a su antojo.
Ejemplo de ello es lo que relató un trabajador: “Cuando doña Olga viajó recientemente a Turquía, junto con otros legisladores en misión parlamentaria, dejó instrucciones de agendar un documento para que se presentara en la sesión pública ordinaria en la que estaría ausente.
La instrucción fue obstaculizada por Monreal, lo que ocasionó tremendo pleito que se manejó en confidencia, pero que dio lugar a que se comenzaran a filtrar otras irregularidades, como el supuesto destino de 12 millones de pesos del presupuesto senatorial para financiar ediciones de sus libros.