Como ya es sabido por todo el mundo, y esto se encamina para un récord guinness, no hay mañanera en la que el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, se refiera con tono de pleito y reproche a la prensa de su país…

Pero lo ocurrido el jueves pasado en su tradicionales conferencia raya en la más completa irreverencia a la praxis periodística y confirma lo que ya es un comentario cada vez más abierto y público y es precisamente que don Andrés solo reconoce como buen periodismo al que se refiere a él en sentido positivo y cuando se le exhibe sus hierros son más que corruptos…

Aquí esta joya en sus palabras textuales que siguen alimentando las páginas de lo que será libro anecdotario: “Un columnista, un periodista, un servidor público, pues tiene que hablar con la verdad y respetar al pueblo, independientemente de sus consideraciones o de sus preferencias políticas, ideológicas. Si se escribe, si es servidor público, por razones éticas se tiene que decir la verdad, no manipular, no engañar”…

¿Cómo se le podría llamar a esta materia en una escuela de periodismo?...

Que quede para la reflexión…