Como Transparencia Mexicana

El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que revisará la forma en que se utilizaba la figura de “testigo social” que atestiguaban algunas organizaciones como Transparencia Mexicana, porque “ha habido mucha simulación y al final solo son alcahuetes para legitimar contratos leoninos”.

El presidente se motivó al escuchar la siguiente pregunta del reportero: “Señor, estuvimos revisando los contratos, o más bien los procesos de licitación de los siete gasoductos que están paralizados y que ya hemos referido varias veces en esta conferencia, y descubrimos que se utilizó una figura que se solía utilizar mucho en esos tiempos, una figura de testigo social u observador social para avalar, digamos, la pulcritud de los procesos y de los contratos, en seis de los siete casos de estos gasoductos se utilizó como respaldo, digamos, como aval moral a Transparencia Mexicana. La pregunta es, primero, si usted, el gobierno, seguirá utilizando esta figura que se utilizaba en ese entonces, porque, de hecho, Transparencia Mexicana concluyó que los contratos de estos gasoductos habían sido pulcros, se habían ajustado al Plan Nacional de Desarrollo, al Plan Nacional de Infraestructura e incluso se ajustaban a la política de bajar el precio de los energéticos; es decir, un aval por completo a estos contratos y a estos procesos de licitación.

A esto, López Obrador respondió: “Estas instancias, supuestamente independientes, autónomas, de la sociedad civil, han servido para legitimar contratos leoninos, los testigos sociales son ciudadanos expertos, aparentemente autónomos, independientes, que avalan este tipo de contratos.

“Hay la experiencia que son figuras decorativas, por decir lo menos, porque si decimos lo más son como alcahuetes y entonces firman que está muy bien el contrato, que se ajusta a la política de desarrollo y que es bueno para el país.

“Y entonces se cumple con ese requisito y adelante, cuando la negociación se hizo de antemano a puerta cerrada, con influyentísimo y con corrupción de por medio. Hay antecedentes sobre esto.

“Entonces, sí vamos a revisar todos esos procedimientos, o sea, terminar con la simulación. Además, a los testigos sociales se les paga, cobran, es una especie de soborno, lo digo con todo respeto, y no quiero generalizar, pero ya es tiempo de hablar con claridad sobre las cosas.

“Entonces, sí tienes toda la razón, imagínense esos contratos.

“Lo expliqué, lo vuelvo a decir, se estimó que la construcción de un gasoducto iba a costar mil millones de dólares y se termina pagando hasta ocho mil millones de dólares, además de que es un abuso, aun incluyendo el costo del financiamiento, lo más inaudito es que el gasoducto no pasa a ser propiedad de la Comisión Federal de Electricidad, de la empresa que paga la construcción del gasoducto, sino se queda como propiedad de la empresa que construye el gasoducto.

“Eso no creo que exista en ningún país del mundo, porque eso es más que corrupción. Entonces, avalar que ese contrato es bueno para la nación es una falsedad.

“Entonces, tienes toda la razón, todo esto se está revisando.

“Al mismo tiempo no queremos escándalos, no queremos que digan que estamos rescindiendo contratos, que estamos incumpliendo con compromisos de los anteriores gobiernos.

“Estamos haciendo un llamado a las empresas a que haya una renegociación y que sea voluntaria, de parte de ellos, porque de lo contrario significa la quiebra de la Comisión Federal de Electricidad”.

26/03/2019

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