Por Paula Bertolini

Qualcomm comenzó a presionar al gobierno de Estados Unidos para obtener una licencia que le permita continuar suministrando chips 5G a Huawei. La compañía quiere revocar las restricciones a la venta de componentes a China, según informó The Wall Street Journal.

Después de la prohibición impuesta por el gobierno de Estados Unidos para impedir que empresas locales exporten semiconductores a proveedores chinos, Qualcomm teme perder miles de millones de dólares. Según el diario, con estas restricciones, Estados Unidos ha entregado a los competidores extranjeros de Qualcomm un mercado valorado en 8 mil millones de dólares anuales.

En mayo pasado, la Oficina de Industria y Seguridad (BIS, por sus siglas en inglés) del Departamento de Comercio de Estados Unidos restringió la capacidad de Huawei de utilizar la tecnología y el software de Estados Unidos para diseñar y fabricar sus semiconductores en el extranjero. Según esta dependencia, la medida es para proteger la seguridad nacional de EE.UU.

Al no poder adquirir chips estadounidenses, Huawei está obligada a buscar en otro lado sus necesidades de semiconductores, probablemente aumentando los negocios con MediaTek en Taiwán y Samsung de Corea del Sur.

Por esta limitación, la semana pasada, Huawei admitió que su último teléfono inteligente insignia, el Mate 40, será el último modelo en usar los procesadores Kirin de alta gama fabricados por su subsidiaria HiSilicon.