*Hacienda debe una explicación

Acordamos citar a comparecer al titular del Sistema de Administración Tributaria (SAT) y al subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, con el objetivo de discutir la pertinencia de mantener o no algunos regímenes fiscales especiales.

De acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda, el presupuesto de gastos fiscales para 2011 equivale al 4.2 por ciento del Producto Interno Bruto, es decir, más de 589 mil millones de pesos. De ese tamaño es el impacto de los  tratamientos fiscales especiales, es mucho dinero el que se deja de recaudar”.

Es relevante iniciar la discusión desde enero para desagregar los criterios y poder, con la comparecencia del subsecretario de Ingresos  y del titular del Sistema de Administración Tributaria, construir en forma conjunta los criterios de beneficio social o económico que se dan con estos tratamientos fiscales especiales.

Hubo un incremento sustantivo del presupuesto de gastos fiscales que pasó en 2009 de 486 mil millones de pesos a 589 mil millones de pesos en 2011. El tema es que no nos desagregan la información.

Necesitamos tener los criterios de evaluación social o económica de cada una de ellos y a partir de ahí tomar la decisión de cuál se queda y cuál se va; pero no podemos mantener en la opacidad este tipo de tratamientos fiscales especiales sin que tengan una discusión pública, abierta y que los legisladores asumamos la responsabilidad  de tomar decisiones en torno a ellos.  

No es un tema de a quién le quitamos un beneficio fiscal o a quién le otorgamos un nuevo beneficio fiscal, me parece que tiene que haber una medición de cara a la sociedad de cuáles son los beneficios económicos para ciertos sectores o cuál es el impacto social de ciertas medidas y beneficiar al mayor número de mexicanos y no mantener franjas de discrecionalidad en torno a la interpretación de los beneficios fiscales.

En el artículo 27 de la Ley de Ingresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2011 se incorporó la obligación para que la SHCP envíe  a la Cámara de Diputados los criterios de beneficio social o económico que se dan a los tratamientos fiscales especiales y que permitan ser evaluados.

Es paradójico que algunos gastos en aeronáutica civil, es decir aviones privados, sean 100 por ciento deducibles y no se puedan deducir grabadoras o laptops.

La pregunta no es si es bueno o malo que deduzcan algunos sectores; yo creo que la pregunta que nos tendríamos que hacer como sociedad es qué sectores queremos impulsar y cuáles son los sectores prioritarios para el desarrollo nacional”, puntualizó.