*El 90 por ciento de los estudiantes han sufrido bullying
Es indispensable crear un grupo plural de legisladores para la atención de la violencia y acoso escolar en México, toda vez que se calcula que el 90 por ciento de los estudiantes han vivido este grave fenómeno.
De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), México ocupa el primer lugar en violencia contra menores.
En tanto, la “Fundación en Movimiento” señala que en 2010, 190 jóvenes en el Distrito Federal se quitaron la vida a consecuencia de las agresiones que sufrían en la escuela.
Para muchos niños y jóvenes la escuela se ha convertido en uno de los lugares más inseguros, ya que están expuestos a la violencia y al maltrato.
Además, el acoso escolar o bullying no sólo les causa bajo rendimiento académico y deserción, sino conflictos emocionales que pueden llevar a la víctima hasta el suicidio.
El bullying va desde la exclusión social, insultos, menosprecios en público, persecución, intimidación, tiranía, chantaje, manipulación, amenazas, golpes, empujones o palizas.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) establece que la agresividad de los alumnos es un desafío, por lo que se deben reforzar los mecanismos jurídicos para calificar a esta práctica como antisocial e indebida.
La sociedad no puede permanecer ajena al problema de la violencia y acoso escolar, ya que es un maltrato que se da en uno de los ámbitos fundamentales para la socialización de los niños y el desarrollo nacional.
Este problema se debe poner en la agenda de los poderes públicos para asegurar su prevención, detección e intervención eficaces. Debe ser liderada por la comunidad educativa y la familia, culminando en la actuación judicial.
Gobiernos como el del Distrito Federal han implementado campañas y programas contra la violencia en las escuelas, en donde la policía y procuraduría capitalina participan con pláticas y talleres.
En el Congreso de la Unión se han presentado diversas iniciativas a fin de modificar e incluir soluciones que podrían incidir en la reducción de esta problemática. Tan sólo en la actual Legislatura han sido presentados 17 proyectos de decreto.
Por ello, solicito a la Junta de Coordinación Política que en la Cámara de Diputados se conforme un grupo de trabajo encaminado a aportar soluciones prácticas para reducir la violencia y el acoso escolar en el país, y dé seguimiento a las iniciativas presentadas para que las comisiones emitan los dictámenes correspondientes.