*Virtual desaparición de poderes
Ante los hechos ocurridos en varios municipios de Michoacán y el nombramiento de quien fungía como Procurador Federal del Consumidor, Alfredo Castillo Cervantes, como Comisionado para la Seguridad y el Desarrollo Integral del estado, salen señales de que Los Pinos quiere controlar a esa entidad.
El nombramiento de uno de los colaboradores más cercanos de Peña Nieto con poderes plenipotenciarios es una virtual desaparición de poderes en aquella entidad, va como Procónsul a hacerse cargo del gobierno de Michoacán.
Cabe recordar que en el Estado de México, Alfredo Castillo recibió la encomienda de resolver el caso de la niña Paulette y ya en el gobierno federal, de investigar los hechos ocurridos en la explosión de la Torre B2 de la Torre de Pemex; hechos en los cuales su actuación arrojó dudas y falta de resultados convincentes.
Es el bombero de Peña Nieto, pero un bombero que no ha podido apagar ningún fuego, como titular de PROFECO su actuación fue tibia y negligente frente a la reetiquetación de precios provocada por la entrada en vigor al inicio del presenté año de la reforma hacendaria.
pareciera que Castillo Cervantes considera este grave problema como un juego, esto por las declaraciones que hizo donde se comparaba con un estratega de fútbol; la realidad dista mucho de ser un encuentro deportivo, se necesita articular una estrategia eficaz en materia de seguridad que permita hacer frente a todos los grupos criminales que están minando el orden en el estado de Michoacán y en gran parte del territorio nacional.
Ante la situación imperante de ingobernabilidad que se vive en varias partes de la entidad, resulta urgente implementar acciones concretas que permitan reinstaurar la paz y la tranquilidad que se vivía hasta hace unos años, y sobre todo reconstruir el tejido social, no es sólo un problema policiaco, es un tema de cohesión social y armonía comunitaria.
Hasta el momento la estrategia de combate al crimen organizado por parte del gobierno de Enrique Peña Nieto ha fracasado, sigue el mismo modelo de Felipe Calderón, lo único que ha cambiado es el discurso.
Reiteramos que hay incesante violación a los derechos humanos, razón por la cual se deben tomar las medidas pertinentes en contra de aquellas autoridades que incumplan sus deberes y hagan uso indebido de sus atribuciones.