*Todas las cifras oficiales coinciden en pobreza
En 2010 el número de mexicanos pobres alcanzó la cifra de 58.5 millones, con una desigualdad persistente en sus distintas dimensiones.
Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de las Políticas Públicas (Coneval), el 10 por ciento de las personas más pobres reciben 1 por ciento del ingreso nacional, en tanto que el 10 por ciento más rico percibe el 40 por ciento. El 52 por ciento de la población no tiene el ingreso suficiente para satisfacer sus necesidades básicas.
La Comisión de Desarrollo Social de la Cámara de Diputados, a la que pertenezco, tiene registrado que el número absoluto de pobres en este sexenio creció 26 por ciento. En las zonas urbanas fue del 37 por ciento, mientras que en las rurales el incremento fue del 16 por ciento.
Las políticas económicas y los programas implementados por el gobierno federal han sido insuficientes para romper con los problemas estructurales de pobreza en las regiones.
Los 273 programas de desarrollo social en esta administración son calificados en lo individual y no desde una perspectiva de su eficiencia para articular acciones de desarrollo, además de que han generado la casi nula capacidad de los estados para implementar acciones estratégicas.
El problema de fondo es el abandono del papel del Estado como promotor del crecimiento, aunado a la carencia de una política industrial, la falta de una eficaz banca de desarrollo y la ausencia de políticas de empleo que fortalezcan el mercado interno y que eleven la competitividad.