*Se debilita el municipio

Todos los esfuerzos encaminados a fortalecer este nivel de gobierno, inclusive creo, tendrían que estar abanderados y asumidos por todas las fuerzas y por actores políticos de nuestro país. Lamentablemente esta visión no es compartida por todos.

Tristemente el municipio en México adolece por ser un elemento reducido en el contexto histórico, constitucional y legal. Y la consecuente debilidad institucional del municipio se enmarca en un sistema federal con tendencias centralizadoras que ha dado al traste con el pleno desarrollo de este nivel de gobierno, lo que sin duda nos sitúa como una nación donde la brecha de desigualdad es alarmante.

En tal sentido, está claro que nuestro marco jurídico no permite a los municipios ejercer por sí mismos la soberanía popular y, por lo tanto, están incapacitados para ampliar sus competencias.

El proyecto que presenté a la consideración del pleno pretende ser una herramienta normativa que se sume a los múltiples esfuerzos realizados por los que pensamos hoy en día es infranqueable la lucha para fortalecer esta unidad primigenia de gobierno, y que es, sin lugar a dudas, el lugar donde se encuentran las personas que carecen de oportunidades para alcanzar el mínimo nivel de vida digna.

Así pues, nuestra regulación reconoce al municipio como la base de la organización política y administrativa de todas las entidades que conforman la Federación, empero, las limitaciones jurídicas han dejado, reitero, al municipio mexicano en una especie de rezago institucional, lo que ha puesto en tela de juicio su jerarquía natural, política, social y económica frente a otros niveles de gobierno.

De esta forma, insisto, la presente iniciativa tiene como objetivo fundamental proponer mecanismos jurisdiccionales que permitan garantizar a los municipios su autonomía fiscal.

Si logramos dotar al municipio de los medios jurisdiccionales, no sólo abonaremos en la tutela efectiva de sus atributos, de sus facultades y derechos en materia de coordinación fiscal.