*SAGARPA debe cancelar la siembra de soya transgénica

La exportación de miel mexicana podría sufrir un revés inesperado que perjudicaría la economía de más de 42 mil familias de apicultores, ante la prohibición de la Unión Europea de comprar miel generada a partir de polen y néctar transgénicos.

Se ha generado una grave polémica por la autorización de la Secretaría de Agricultura a la transnacional Monsanto, para cultivar más de 250 mil hectáreas de soya transgénica.

En México la siembra de soya transgénica puede desequilibrar las finanzas de los productores nacionales de miel, ante el rechazo de la comunidad internacional del dulce generado por cultivos no autorizados.

Frente a la polémica generada por la empresa Monsanto, apicultores de Campeche, Quintana Roo y Yucatán, han levantado denuncias ante instancias judiciales, por lo que SAGARPA debe cancelar la autorización para la siembra de soya transgénica.

El procedimiento de la Secretaría de Agricultura no se realizó conforme las normas constitucionales, tratados internacionales, ni a los principios fundamentales en materia de bioseguridad.

La decisión arriesga la calidad de la miel mexicana, de la cual, nuestro país es tercer exportador mundial; pone en riesgo el principal mercado de este producto y provocaría graves consecuencias sociales, económicas y ambientales en contra de los apicultores nacionales.

La Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad, reveló que la soya transgénica contiene genes de bacterias que le permiten ser resistente al herbicida, además, podría afectar la conservación de la riqueza en biodiversidad, la permanencia de semillas y granos nativos.

Resulta necesario corregir el rumbo en la producción de soya transgénica, por lo que el Gobierno Federal tiene la decisión en sus manos, de detener la siembra de transgénicos e iniciar un verdadero apoyo a los apicultores mexicanos.