*Aplaudimos decisión de Obama que beneficia a migrantes

Saludamos las modificaciones propuestas por el gobierno de Barack Obama para agilizar el proceso de solicitud de residencia permanente, mediante el cual se reducirá el tiempo de separación entre los ciudadanos estadounidenses y sus esposos o hijos indocumentados mientras regularizan su situación migratoria.

Pero solicitamos a la Secretaría de Relaciones Exteriores que exhorte al gobierno estadounidense para que el proceso de regularización migratoria de familiares de ciudadanos en Estados Unidos se haga también extensivo a los familiares de residentes permanentes.

La medida representa un esfuerzo más de la administración del presidente Barack Obama por buscar los medios para realizar pequeños cambios que tengan un impacto importante en la vida de nuestros migrantes, sin necesidad de consultar al Congreso de Estados Unidos, donde los republicanos se oponen fuertemente a estas medidas por considerarlas impopulares.

Actualmente, los esposos o hijos extranjeros de ciudadanos estadounidenses deben regresar a su país de origen para tramitar un permiso de residencia. Dicha salida del país puede dar paso a un castigo de 3 a 10 años, en los que la persona no puede reingresar a Estados Unidos, para aquellos que han violado las leyes migratorias, ya sea porque son indocumentados o porque han vivido en el país por más de seis meses.

La ley contempla una excepción por la que el familiar del ciudadano estadounidense puede solicitar un “perdón” o "waiver" para que se le permita volver a Estados Unidos sin cumplir la prohibición. Sin embargo, el trámite para que esa dependencia estadounidense otorgue el “perdón” puede tomar de seis meses a más de un año, además de que para solicitar dicho beneficio debe hacerlo en un consulado o Embajada americana en su país de origen.

Con las modificaciones propuestas por la administración Obama se espera que ese proceso se reduzca a días o semanas, además se podrá solicitar el "perdón" en Estados Unidos, antes de regresar a su país, sin embargo, la medida sólo se aplicará a los familiares de ciudadanos y no a los residentes permanentes.

Por ello pedimos que la cancillería mexicana exhorte al gobierno americano para que ese beneficio se haga extensivo para los familiares de residentes permanentes y hacemos votos por la pronta publicación de las nuevas medidas migratorias por parte del Departamento de Ciudadanía y Servicios de Inmigración (USICS por sus siglas en inglés), a fin de que entren en vigor a la brevedad.

Los cambios en la política migratoria de Estados Unidos beneficiarán a miles de inmigrantes que no tienen antecedentes penales y que solamente han violado las leyes de inmigración de ese país, así como a aquellos que demuestren que su ausencia de la familia podría causar dificultades o daño extremo para el cónyuge o padre ciudadano.

En 2011, el gobierno estadounidense recibió 23 mil solicitudes de “perdón”, de las cuales 16 mil fueron aprobadas.