*Muy complicado cumplir con el pago del ISR
Con la entrada en vigor de la nueva Ley del Impuesto sobre la Renta, a partir del 1° de enero de 2014, desaparece el régimen de pequeños contribuyentes, Repecos e intermedios.
En su lugar se crea el régimen de incorporación fiscal, RIF, mismos que se regulan en el título cuatro, capítulo 2, sección segunda de la Ley del Impuesto sobre la Renta vigente.
El nuevo régimen… es aplicable solo a personas físicas que realizan actividades empresariales; que enajenen bienes o que presten servicios, por los que no se requiere… los que se requiriera para su realización, título profesional, con ingresos anuales hasta dos millones de pesos.
Los contribuyentes de este régimen, efectuarán pagos definitivos bimestrales. Teniendo un descuento del Impuesto sobre la Renta, del 100 por ciento del pago durante el primer año; el cual ira disminuyendo paulatinamente a lo largo de los siguientes 10 años, para pagar un total de Impuesto sobre la Renta, a partir del año 11.
Las obligaciones que tienen este régimen, son las siguientes:
Conservar comprobantes con requisitos fiscales.
Registrar vía Internet, ingresos, egresos, inversiones y deducciones.
Entregar a sus clientes comprobantes fiscales, con factura electrónica.
Efectuar el pago de erogaciones, superiores a dos mil pesos, mediante cheque, tarjeta de crédito o débito o transferencia.
Presentar declaración bimestral definitiva, vía Internet.
Pagar el impuesto sobre el valor agregado.
Pagar el impuesto especial sobre productos y servicios, sobre todo de los productos chatarra.
Y retener el Impuesto sobre la Renta a sus trabajadores.
La problemática que tienen todos estos pequeños contribuyentes, son las siguientes:
Estamos hablando de contribuyentes, como tienditas de abarrotes, fruterías, peluquerías, piedras en los mercados, tianguistas, todos ellos que en este momento están registrados como Repecos, y que suman aproximadamente, según datos del propio SAT, 3.8 millones de contribuyentes.
La problemática en estos dos meses, de inicio de la reforma hacendaria, es la siguiente:
El SAT, supuestamente, envía dos cartas. Una para el cambio del régimen automático, y otro para una contraseña, con la que ellos tendrían que hacer todas las operaciones vía Internet.
Dos. En el caso de que no te llegue esta información, estas cartas, hacer una cita en las oficinas del SAT… tres citas, una para la orientación fiscal, otra para la contraseña y otra para el cambio de régimen.
Para que te den un turno en el SAT, va de un mes a dos meses aproximadamente.
Y cuando llegas allí, o ya que tengas ese turno y esa capacitación, regresas a la página de Internet del SAT y nunca funciona.
Si tienes alguna duda, puedes consultar al 01-800, y en el 01-800 del SAT, nunca te contesta.
El SAT crea un sistema, que se llama “Sistemas mis Cuentas” que es donde las tienditas y los changarros van a capturar todos sus ingresos y gastos. Un sistema que nunca funciona.
Determinar sus declaraciones vía sistema, una persona que atiende una tienda de abarrotes, una frutería, no va a saber, en ningún momento, cómo determinar su declaración, mediante sistema.
Y expedir facturas electrónicas vía Internet.
¿Qué requiere ahí?
Que una tienda de abarrotes o un puestecito de un mercado debe tener una computadora, una impresora, un teléfono y un Internet.
Un taxista también está obligado a esto, y debe de traer ahí en su carro todo este equipamiento, porque de lo contrario, si hay un cliente que le pide una factura por los 50 ó 60 pesos, tiene la obligación de dar una factura electrónica bajo este nuevo régimen.
Otro punto importante que es imposible de llevar a cabo por parte de los pequeños contribuyentes, es el sistema bancario.
Para las compras de 2,000 pesos de cualquiera de estos changarros, debe hacerlas mediante cheque nominativo; mediante tarjeta de crédito; tarjeta de débito o una transferencia bancaria; todo mundo tenemos una tienda cerca de nuestra casa, una lonchería o cualquier negocio o han ido a algún mercado, imagínense si pueden tener todo esto unos pequeños contribuyentes.
Son los problemas más relevantes que han ocurrido en estos últimos dos meses por esta reforma; solamente en mi estado hay 45,000 REPECOS que no van a poder cumplir con esta obligación.
La propuesta es la modificación, adición al Artículo 113ª de la Ley del Impuesto Sobre la Renta que tenga las siguientes características para estos pequeños contribuyentes, que seguramente son más de 2 millones de contribuyentes.
Que se establezca un régimen de excepción con las siguientes características:
Que las actividades de un peso a 750,000 de ventas al año puedan estar en este nuevo régimen.
Expedir como venían haciéndolo, un comprobante simplificado, una simple nota, donde no tengan que desglosar el IVA y el IEPS, no olvidemos que, en una tiendita hay productos que gravan al 16, otros que gravan al 0, otros exentos, y otros que gravan IEPS con la nueva ley de la comida chatarra.
Entonces, bajo este esquema dejarlos exentos también, en estos impuestos, que es imposible que ellos desglosen; expedir comprobantes simplificados, una nota, eliminar la obligación del sistema bancario para todos ellos, una declaración semestral definitiva, una tasa sobre el Impuesto Sobre la Renta del 1 por ciento sobre las ventas, y con esto la Secretaría de Hacienda va a recaudar el 300 por ciento más de lo que recauda con REPECOS, y de lo que ahora no recauda con el nuevo régimen de incorporación fiscal.
Y proporcionar al SAT las operaciones con los proveedores, porque en realidad esta también es una estrategia del SAT, que por medio de los pequeños quiere tener la información de los medianos y de los grandes, que sí es una buena estrategia y es una información necesaria para el SAT, pero con ponerle estos candados a los pequeños.
Simplemente basta que los pequeños guarden toda la información de sus notas de sus proveedores, capturarlas en el SAR, el mismo SAR puede capturarlas y con eso tener la información que requiere para los medianos contribuyentes, y que los pagos se hagan en los estados o municipios, puesto que el SAT en ningún estado puede atender los millones de REPECOS que se tienen y que en realidad es imposible que los atiendan.