*Salario, la productividad y la formalidad
El salario, la productividad y la formalidad, constituyen tres de los ejes claves del desarrollo económico de nuestro país.
Desde hace unos meses, y para ser más precisos, desde el primero de mayo en la agenda pública se instaló el debate sobre los salarios en el país.
Es un hecho que desde mediados de la década de los setenta el poder adquisitivo de los trabajadores se ha deteriorado de manera notable y que revertir esta situación, resulta fundamental para el bienestar de millones de mexicanos y las de familias que lo componen.
También ha quedado claro que cualquier ajuste a la política salarial debe realizarse de forma responsable lejos de pretensiones electorales o discursos populistas, que pueden ser muy atractivos, pero que si hacen de manera equivocada o de forma aislada, lejos de solucionar el problema pueden empeorarlo.
Elevar la productividad constituye la mejor carta de presentación de México hacia el exterior.
Un tema fundamental en esta materia es que México debe de dejar de ser atractivo a los inversionistas sólo por el bajo precio de su mano de obra.
El país debe ser capaz de ofrecer un entorno seguro para la inversión, lo cual significa, mano de obra calificada y bien remunerada, vigencia del Estado de derecho, cuidado del entorno, racionalidad en la utilización de los recursos naturales, seguridad y transparencia en el ejercicio público.
Ofrecer un ambiente favorable a la inversión tiene como base la construcción de un modelo de desarrollo que tenga como una de sus aristas fundamentales la responsabilidad social del empresario y formas innovadoras que propicien ciclos económicos en donde la sociedad participe en la producción y con beneficios palpables para la comunidad.
La formalidad del trabajo y de las actividades productivas, son aspectos fundamentales para que el Estado obtenga recursos y para generar una cultura del pago de impuestos.
El aumento de la formalidad del trabajo y de actividades económicas tiene que combinar dos aspectos. Por una parte, la simplificación burocrática administrativa, para pasar de la informalidad a la formalidad y con esto a mayores niveles de ingreso tributarios.
Segundo, el otorgamiento de recursos en acciones de beneficio directo a la población.
Durante dos días, en el Senado de la República analizaremos estos temas. Escucharemos a las voces y perspectivas de los protagonistas del mundo laboral: líderes sindicales, voceros empresariales, funcionarios públicos y representantes de organizaciones relacionadas con este importante tema.
El Senado es un órgano del Estado plural donde existen voces con opiniones y perspectivas distintas, pero todas coincidentes en el marco del interés de nuestro país, del interés por México.