Cifras del Instituto de Atención y Prevención Contra las Adicciones señalan que el inicio en el consumo de alcohol en los niños y niñas es a los 12 años, situación que las autoridades del gobierno capitalino consideran verdaderamente alarmante, porque se encuentran en pleno desarrollo infantil y cuando su cerebro aún está en un proceso de desarrollo y de formación.
Ante tal escenario real, el GCDMX a través de la Secretaría de Educación local, implementó en coordinación con la Asociación de Padres de Familia, las 16 jefaturas delegacionales y la Secretaría de Seguridad Pública, el Programa de Prevención de Venta de Alcohol en Zonas Escolares, para proteger a los estudiantes de todos los niveles del consumo de alcohol en las inmediaciones de sus escuelas.
Pero no sólo es blindar las zonas de influencia como vinaterías, bares, pulquerías, antros, licorerías, cervecerías o abarrotes con licencia para la venta de bebidas alcohólicas, sino influir en las familias, en los padres para reforzar la comunicación con sus hijos, pues la edad temprana -12 años- para acercarse a los licores tiene orígenes internos, en el hogar, como la curiosidad, invitación de amigos, experimentar, problemas familiares, influencia de amigos, entre otras causas.
La secretaria de Educación capitalina Mara Robles Villaseñor señaló que el Gobierno de la Ciudad de México realiza acciones de protección a niños y jóvenes, para que los padres de familia no se sientan solos en esta responsabilidad o consideren que “las autoridades educativas sólo nos hacemos cargo de los niños cuando al interior de la escuela”.
En este esfuerzo conjunto, las partes pidieron al Instituto de Verificación Administrativa (Invea), del gobierno capitalino, su intervención para detectar, vigilar, prohibir y en su caso sancionar a los giros comerciales próximos a centros escolares vender bebidas alcohólicas, incluida la cerveza, a lo que su titular Meter Klip se comprometió a realizar operativos de vigilancia con el apoyo de las Secretarías de Gobierno, Educación y autoridades delegacionales para evitar que existan negocios dedicados a la venta de bebidas alcohólicas en las inmediaciones de los centros educativos.
“La idea es que los muchachos que van a las escuelas estén seguros. Esta supervisión será permanente, dijo, a lo largo del ciclo escolar 2014/2015 y los subsecuentes”
Finalmente, el Presidente de la Asociación de Padres de Familia del Distrito Federal, Ramón Villegas Carbajal, agradeció la puesta en marcha del Programa dispositivo en las inmediaciones de los centros educativos, y ofreció el respaldo de los pater familia para denunciar los giros comerciales que violen estas disposiciones, para que la autoridad actúe en consecuencia.
En tanto la SSP se responsabilizará de vigilar y realizar rondines en las proximidades de las escuelas para detectar negocios que subrepticiamente vendan bebidas prohibidas a los niños.