La Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) urgió a los 16 jefes delegacionales a poner en marcha programas de prevención y concientización sobre el grave daño que causa la adicción a solventes, inhalantes y químicos conocidos comúnmente como “monas”.
Además, durante la sesión de este miércoles, la Diputación Permanente demandó a las autoridades respectivas sancionar conforme a la normatividad a las personas y establecimientos que vendan o comercialicen los solventes para uso psicotrópico.
“Dicho programa se llevará a cabo de manera permanente, aleatoria e itinerante en las delegaciones del Distrito Federal, particularmente en las tlapalerías, escuelas, centros de diversión y reunión de jóvenes”, argumentó en tribuna el diputado del PRD, Alejandro Robles a nombre de su compañero de bancada Víctor Hugo Lobo Román.
También propuso que las secretarías de Salud, Educación, Seguridad Pública, así como el Instituto para la Atención y Prevención de las Adicciones en el Distrito Federal y el Instituto de Verificación Administrativa, se coordinen para instrumentar las acciones preventivas necesarias en la capital del país.
En el documento del punto de acuerdo, los diputados Robles Gómez y Lobo Román, anunciaron que presentarán un paquete de reformas a los ordenamientos jurídicos del Distrito Federal, a fin de “endurecer las penas” en contra de quienes envenenen a niños y jóvenes.
Dijo que establecerán en la ley la obligación de las autoridades para coordinarse de manera transversal para la prevención con efectividad del uso de esas sustancias tan dañinas para la salud y la sociedad.
Robles Gómez y Lobo Román, alertaron sobre la urgencia de atender el problema de los inhalantes, pues su uso se ha potencializado debido a la facilidad con que se obtienen dichas sustancias que derivan en una “mona”, cuyo costo oscila entre 1 y 5 pesos por pieza. “Las hay con saborizantes, de colores y pueden ser hechas de tela, estopa, algodón, bolsas de plástico y hasta con papel de baño”, afirmaron.
Los legisladores del partido del sol azteca, manifestaron que las autoridades capitalinas han detectado que la venta de solventes se realiza en tiendas, comercios establecidos, puestos del comercio informal, tianguis, tlapalería, algunos comercios establecidos en la vía pública y domicilios particulares.
“Es necesario destacar que el acceso a esta modalidad de droga ha disparado y agudizado el ya de por sí lacerante problema de los miles de niños y jóvenes adictos y abandonados en situación de calle”, expresaron los perredistas.
También demandaron no perder de vista que el uso de esas sustancias sumado a la descomposición del tejido social deriva en problemas delincuenciales. Señalaron que en México existen casi 5 mil niños y jóvenes recluidos en 54 centros tutelares, de los cuales el 70 por ciento están en prisión por robo para mantener su adicción.
Advirtieron que el consumo de inhalables causa daños crónicos como deterioro cognitivo, disminución de capacidades sensoriales, pérdida de visión, audición y coordinación, perturbaciones del sueño, disminución de peso y volumen cerebral. Asimismo, deriva en males como microcefalia (cabeza chica), labio y paladar hendido (labio leporino), disminución del pliegue de los ojos, dedos en “espátula” y retraso intelectual y físico.