Las instituciones de salud en el Distrito Federal gastan 39 mil millones de pesos en la atención de enfermedades derivadas del tabaquismo y alcoholismo, aseguró la Presidenta de la Comisión de Salud en la ALDF, Maricela Contreras Julián.

Durante la Mesa de Trabajo con Maricela López Cabrera, Directora General del Instituto para la Atención y Prevención de las Adicciones en la Ciudad de México (IAOA), la legisladora del PRD dijo que para atender enfermedades derivadas del tabaquismo se gasta anualmente en las instituciones de salud 24 mil millones de pesos, mientras que para el alcoholismo son 15 mil millones.

Explicó que en la Ciudad de México datos de la Secretaría de Salud local indican que existen aproximadamente un millón 538 mil fumadores y que la edad de inicio de la primera prueba de un cigarro es a los 10 años; mientras que el 5.6% de la población abusa o depende del alcohol, presentándose el consumo desde los 13 años.

Contreras Julián señaló que en el caso de las drogas ilegales muestra características particulares, ya que en la capital la edad de inicio del consumo de este tipo de drogas disminuyó en seis años, pues en 2005 se probaba alguna droga a los 15 años, mientras que para 2011 el promedio de edad es a los 10 años.

En el caso de las mujeres, si bien la estadística señala que hay una por cada 4.6 hombres que consumen drogas ilícitas, las cifras de la Encuesta Nacional de Adicciones arrojan que se ha duplicado el número de mujeres consumidoras de 2002 a 2008, enfatizó.

Apuntó que la Prevención y Atención de las Adicciones es uno de los ejes fundamentales del trabajo legislativo en la ALDF, el cual contiene un enfoque de respeto a los derechos humanos y de no incrementar la espiral de violencia que actualmente se vive en todo el país.

En la Ciudad de México -dijo- la mejor forma de abatir la inseguridad pública y el narcotráfico, es mediante la solución a problemas estructurales como la falta de empleo, educación y vivienda

Indicó que estos factores inciden en el consumo de drogas, sumando un elemento alarmante respecto al perfil de las personas consumidoras o que inician en ese camino, pues cada día más mujeres, jóvenes y niños engrosan las filas de personas adictas, o bien, inician su vida en el consumo de drogas, ya sean lícitas o ilícitas.

El problema -mencionó- no es menor y merece toda la atención por parte de las autoridades bajo una visión que brinde soluciones, que no criminalice a las personas adictas y no utilice la represión como instrumento para la atención del consumo de drogas.

La legisladora perredista añadió que desde la ALDF se trabaja para construir políticas de atención a las adicciones, muestra de ello, es el marco jurídico que se aprobó para la verificación de los denominados anexos o el rechazo a disminuir los espacios 100% libres de humo de tabaco.

Reconoció la Ley para la Atención Integral del Consumo de Sustancias Psicoactivas y la creación del Instituto para la Atención y Prevención de las Adicciones de la Ciudad de México, como únicos en su tipo a nivel nacional y que marcan una clara diferencia de las políticas con otras entidades de la República.

Existe mucho trabajo por delante para hacer que disminuya el consumo de drogas ante la expansión del narcomenudeo, así como para reducir el consumo de alcohol, tabaco, inhalables o alguna droga ilícita a temprana edad y brindar alternativas de esparcimiento a los jóvenes que acuden a las fiestas clandestinas, expresó.

El reto fundamental para consolidar el papel rector del Instituto es conseguir recursos para su operación, pues en este año se asignaron 400 millones de pesos del Presupuesto de Egresos de la Federación gracias a las gestiones conjuntas de funcionarios, diputadas y diputados locales y federales, sin embargo, de no obtenerse un presupuesto similar, se corre el riesgo de no llevar a cabo todo el programa Institucional para la Atención Integral del Consumo de Sustancias Psicoactivas en el Distrito Federal, finalizó.