Por Guillermo Pimentel Balderas
El Partido Verde del DF exhorto a las autoridades del Gobierno del Distrito Federal a dejar de tolerar la ilegalidad con la venta de mercancía robada y extremar su vigilancia en apoyo del sector formal de la industria y el comercio nacionales, evitando robos a transportistas que acuden a la Central de Abastos (CEDA) y que en consecuencia motivan alzas a los precios de los productos entregados legalmente entre un 10 y 15 por ciento.
En entrevista, el dirigente del Verde capitalino, Samuel Rodríguez Torres, exhorto de igual forma a la administración de la CEDA a que incremente la seguridad dentro de esas instalaciones y proteja a los consumidores, pues a pesar de que en ese sitio se manejan millones de pesos a diario, no se cuenta con un cuerpo de seguridad eficiente que recorra los pasillos de las naves comerciales verificando la propiedad de los productos.
“La Central de Abasto de Iztapalapa (CEDA) se ha convertido en refugio para la delincuencia afectando el bolsillo de la ciudadanía en general, pues la gran mayoría de camioneros que llegan a comercializar algún producto han sido asaltados, ya sea en el trayecto hacia la metrópoli o en las instalaciones del lugar, situación que encarece los productos entregados de 10 a 15 por ciento según datos del Sindicato Nacional de Transporte”.
Rodríguez Torres dijo que en ese sentido, la Asociación Mexicana de Seguridad Privada, Información, Rastreo e Inteligencia Aplicada (AMSIRIA), elaboró un mapa delictivo en torno a las zonas más peligrosas para los transportistas de carga en el DF, y concluyó que tras cinco años de funcionamiento del Mapa Virtual, el mayor número de robos en el transporte ocurre en el área metropolitana y en los límites de los municipios del Estado de México
Destacó que en zonas como la calzada Ignacio Zaragoza, Circuito Interior, Vallejo y Periférico, también resultan muy peligrosas para los camioneros, y que por la operación de la Central de Abasto y el enorme flujo económico y vehicular que este mercado de distribución de alimentos representa, “el robo a transportistas es el segundo ilícito que afecta a los vecinos de esta región”.
Asimismo, señalo que el sindicato de transportistas, que agrupa unos 40 mil integrantes, denuncio que la delincuencia en Iztapalapa es la que mayor parte de los delitos comete con el uso excesivo de violencia, pues tan solo de los 15 vehículos que se roban a diario, ocho son mediante el uso de la fuerza, armas de fuego, golpes y lesiones.