Las demandas de la Ciudad de México deben dejar de ser carnada para atraer micrófonos y convertirse en prioridades legislativas, más allá de vistosas reformas político- administrativas, afirmó la senadora Ana Lilia Herrera Anzaldo, secretaria de la Comisión del Distrito Federal del Senado de la República.
Ojala que su posición sea escuhada en la naciente VI Asamblea Legislativa y que incluso haya colaboración entre los congresos locales del DF y el Edomex para lograr las mejoras territoriales que demandan los defeños y mexiquenses.
La senadora Herrera Anzaldo preside desde el miércoles la Comisión del Distrito Federal y de inmediato acusó que las reformas para el D.F. han sido lentas porque nadie ha tenido la voluntad de acelerar las negociaciones más allá de simples declaraciones.
Con la valentía que le caracteriza, la legisladora priísta por el Estado de México externó su interés en que los problemas de la Zona Metropolitana del Valle de México se atiendan con una visión “megalopolitana” que responda a problemas comunes, con soluciones conjuntas.
Y aprovechó para hcer un llamado al jefe de gobierno del Distrito Federal electo, Miguel Ángel Mancera, a las universidades y centros de investigación, a los alcaldes de otras capitales del mundo, a los propios capitalinos, para trabajar conjuntamente en el diseño de una arquitectura jurídica de la Ciudad de México acorde al siglo XXI. “No empezaremos de cero. Recuperemos todas aquellas propuestas de reformas políticas, económicas y administrativas que han ido surgiendo a lo largo del tiempo”, dijo y la pregunta es si la escucharán, pero sobre todo si se contagiarán de su entusiasmo.
Ya veremos porque la senadora fue enfática al insistir en que el mejoramiento de la calidad de vida de los ciudadanos debe ser prioridad y con humildad pidió: “Trabajemos por la Ciudad y por los ciudadanos que van inseparablemente de la mano, pero esto requiere del diálogo de todas las partes para lograr el mejoramiento en los rubros de seguridad pública, protección civil, procuración de justicia, salud y educación".
Una y otra vez demandó llegar a acuerdos que beneficien a los defeños en materia de urbanización; vivienda; transporte; agua potable; drenaje y tratamiento de aguas negras y ecología.
Finalmente, pero con el mismo entusiasmo, Herrera Anzaldo dijo que en el marco del federalismo y con equidad social para el interior del país, se debe consolidar al Distrito Federal como centro de interrelaciones políticas, económicas, financieras y culturales.