En respuesta a las amenazas hechas por Vicente Yáñez, presidente de la ANTAD de no invertir más en el Distrito Federal y abrir tiendas de autoservicio en el Estado de México, el diputado Maximiliano Reyes Zúñiga lanzó un reto a la Asociación de Tiendas de Autoservicio: “quiero ver quién va a ser el primer valiente en salirse del Distrito Federal”
“Ojalá cumplan sus amenazas, a ver si en otra entidad encuentran las ventajas que les brinda la Ciudad de México: quiero ver que encuentren servicios de agua y alcantarillado de la misma calidad y tan baratos como los del D.F., a ver si la energía eléctrica, la facilidad de acceso y sobre todo el mercado con el nivel adquisitivo que representa la Ciudad de México lo igualan en otra parte”, declaró el secretario de la Comisión de Hacienda de la ALDF.
“La Norma 29 regula usos de suelo, nadie le va a impedir a los supermercados que operen normalmente y no hay ninguna violación a la libre competencia, hay una regulación de desarrollo urbano, un proyecto de compactación de la ciudad y recuperación de espacios públicos, de centros de barrio, de posibilidades de caminar y recuperar la calle para los ciudadanos”, recalcó Reyes Zúñiga, ante la acusación de que la norma ataca la competitividad y los intereses de los consumidores.
Con respecto a las supuestas omisiones en la citada ley, el también integrante de la Comisión de Gobierno recordó: “Es una pena que el presidente de la ANTAD no sepa que la canasta básica no la define la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, sino el Banco de México, con una metodología clara y bastante fácil de conocer, alguien debería explicarle esos pequeños detalles antes de salir a gritar amenazas”.
“Ni en la política ni en el mercado hay espacios vacíos, si los empresarios de los supermercados deciden sacar su inversión del Distrito Federal, alguien más ocupará su lugar. Si el Distrito Federal fuera tan hostil como Yáñez lo quiere hacer ver, no tendrían las altas inversiones que tienen aquí, ni el nivel de actual de ventas, ni los altos márgenes de utilidad. Como dice el refrán: “no hay borracho que coma lumbre”, concluyó Reyes Zúñiga.