Son 10 mil veces más pequeños que las células, y aunque dependen de ellas para sobrevivir, son tan eficientes que las engañan, las habitan y despliegan su maquinaria para dominarlas.
Son los rotavirus, microorganismos causantes de gastroenteritis, una enfermedad causante de diarreas agudas, especialmente en bebés y niños menores de cinco años, que cada año provoca la muerte de 600 mil menores en todo el mundo.
“Los virus son los organismos más pequeños de la naturaleza, no se pueden ver con microscopios ópticos, sólo con electrónicos, y tienen una gran variedad, pues hay de vertebrados, invertebrados, plantas, bacterias, algas, hongos, levaduras y protozoarios. Incluso, hay virus de virus”, explicó Susana López Charretón, del Instituto de Biotecnología (IBt) de la UNAM.
En la conferencia Trucos del rotavirus para conquistar a la célula huésped, que ofreció en el VI Ciclo Mujer-Ciencia UNAM 2012, la especialista en investigación biomédica básica explicó que, para entrar a la célula y que ésta no los reconozca como extraños, utilizan ciertos engaños, como introducirse desde la boca hasta el intestino delgado para instalarse solamente en las vellosidades de ese órgano.
Trucos de entrada
“Tienen un ciclo que implica la unión, replicación, transcripción, síntesis, ensamble y salida”, detalló la científica en el auditorio Alberto Guevara Rojas, de la Facultad de Medicina (FM).
Con modelos experimentales, estudia a detalle cada fase del ciclo de vida del rotavirus en su laboratorio del Departamento de Genética del Desarrollo y Fisiología Molecular del IBt.
Así, ha documentado que la estructura está formada de tres capas concéntricas de una proteína que se replica en la célula en el momento que entra a ésta, y que pierde dos proteínas con la enzima ARN polimerasa.
“En las células infectadas con rotavirus se forman estructuras llamadas viroplasmas (que tiene ARN viral), en las que aquél se replica y toma control de la célula respecto a la proteína. Con su propia maquinaria, se replica en el citoplasma celular”. A partir de esa llegada, la infección en los seres humanos ocurre en un periodo de 16 a 18 horas, detalló.
Por esta investigación, la viróloga del IBt es una de las cinco científicas del mundo que recibirá este 22 de marzo el Premio L´OREAL-UNESCO para las Mujeres y la Ciencia 2012.
La distinción, a realizarse en la sede de la UNESCO en París, se otorga “por haber identificado el modo de acción de los rotavirus, responsables cada año del fallecimiento de 600 mil niños”, se informó en un comunicado conjunto emitido en noviembre pasado por la UNESCO y la empresa L’OREAL, en que se dio a conocer el fallo del reconocimiento anual.
Células de cultivo
En su laboratorio del IBt, en Cuernavaca, López Charretón y sus colaboradores estudian el mecanismo básico de ingreso y sobrevivencia del rotavirus con células en cultivo y con un virus que fue aislado de simios. “Es un modelo muy útil para indagar cómo engaña para penetrar y multiplicarse”, precisó.
La científica podría encontrar características muy particulares que utiliza para reproducirse, que podrían tener futuras aplicaciones en otras líneas de investigación.
“Podría servir para desarrollar una molécula que engañe al virus, como un antiviral. Ésa sería una aplicación de los mecanismos que encontramos, pero en este momento no tenemos nada concreto sobre aplicaciones”, aclaró.
Tres décadas de caracterización
Desde que cursaba la licenciatura en Investigación Biomédica Básica en la UNAM, López Charretón conoció al rotavirus, microorganismo recién descubierto que estudiaba uno de sus profesores.
“Empecé a trabajar en el tema desde mi tesis de licenciatura, hace casi 30 años, con Emilio Espejo, que lo investigaba allá por 1979 u 80. Recién se había descubierto a este causante de diarreas y gastroenteritis muy severas en niños, que es responsable de una gran cantidad de muertes cada año. Me enamoré del asunto desde el principio. Comenzar a caracterizar un virus del que se conocía muy poco fue una buena oportunidad, y desde entonces he seguido con su observación”, recordó.
En la conferencia, la universitaria describió al rotavirus como “un virus democrático”, cuyo desarrollo es generalizado en países pobres y ricos.
“Infecta igual a niños de África que de Suecia, pues no se reproduce por un problema de higiene. El problema es que en los países pobres hay poco acceso a servicios médicos, y los niños enfermos mueren por deshidratación. En cambio, en territorio sueco y otras naciones desarrolladas los atienden enseguida”, indicó.
Alta tasa de infección
Su ingreso al organismo humano ocurre por una frecuente contaminación fecal-oral. “Se producen cantidades inmensas del virus en el intestino, que son excretadas en vómito y diarrea. Uno solo es suficiente para infectar a otra persona. El problema es que se secretan miles de millones por cada gramo de heces fecales, entonces es muy fácil contaminarse”, detalló.
Los científicos aún no conocen por qué la infección es más recurrente en bebés y niños, “pero sabemos que a los cinco años todas las personas lo hemos adquirido al menos una vez, así que hay un componente de inmunidad, es como si nos vacunáramos”.
El problema, concluyó, es la primera infección, que es la más severa, y es de la que se trata de proteger a los menores.