El Pleno Camaral rechazó cualquier expresión de violencia contra las diputadas de la LXII Legislatura realizada por los medios de comunicación electrónicos e impresos, toda vez que en los últimos meses se han publicado notas ofensivas en contra de algunas legisladoras de todas las manifestaciones políticas.

A través de un pronunciamiento promovido por la Comisión de Equidad y Género, leído por el vicepresidente de la Mesa Directiva, diputado José González Morfín (PAN), se afirma que dichas notas han violentado la dignidad de “nuestras compañeras diputadas, pues han tratado de desacreditarlas por su forma de vestir, su apariencia o haciendo comparaciones peyorativas y destructivas”.

Se menciona que estas publicaciones violentan la dignidad de las mujeres y fomentan los estereotipos de género, además de que se dan en un marco de total desconocimiento de las leyes mexicanas que protegen el derecho de todas las mujeres a vivir libres de violencia.

Entre esas leyes están la General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y la General de Igualdad entre Mujeres y Hombres, además de los tratados internacionales como la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer y la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia Contra la Mujer, conocida como Convención de Belem do Pará.

En el documento dado a conocer por González Morfín se resalta que los medios de comunicación electrónicos e impresos juegan un doble papel en relación con la violencia contra las mujeres. “Por un lado son un espejo que refleja la violencia estructural que las mujeres padecen en México y, por el otro, contribuyen a perpetuar la misma a partir de la promoción de estereotipos de género y de contenidos ofensivos, discriminatorios y degradantes para las mujeres”.

Se afirma que los medios de comunicación tienen una enorme responsabilidad social con los millones de niñas y mujeres que viven violencia en nuestro país, y la influencia que ejercen puede ser canalizada hacia la erradicación de los distintos tipos de violencia contra ésta y no fomentándolo.

Por ello, se les hace un llamado a conducirse con ética y responsabilidad y a sumarse al gran esfuerzo que la sociedad y el Estado realizan para evitar la naturalización y cosificación de las mujeres, con el firme compromiso de trabajar en la construcción de una nueva cultura de respeto, de no discriminación y de igualdad entre mujeres y hombres.

De igual forma, la Cámara de Diputados se compromete a trabajar coordinadamente a efecto de generar acciones que prevengan, erradiquen y sancionen estos actos, pues no se permitirá que continúen estos agravios que sólo buscan ridiculizar a las legisladoras de esta Cámara.

Con el pronunciamiento, se asumen, en calidad de representantes sociales, al doble escrutinio de la opinión pública y de los medios de comunicación, pero hace votos para que éste se limite  al trabajo legislativo y comportamiento ético.

Se hace un llamado a que todos los medios de comunicación contribuyan en la construcción de un país democrático y que promuevan a través de sus contenidos cambios que fomenten las relaciones igualitarias entre mujeres y hombres, mediante mensajes que eliminen la discriminación y la violencia de género.

En el documento, se afirma que el compromiso del Estado, los medios de comunicación y de la sociedad debe de ser claro, ya que “la violencia y la discriminación contra las mujeres no pueden reproducirse ni tolerarse, pues de lo contrario se impedirá la construcción de la nación respetuosa, igualitaria y garantista y del ejercicio de los derechos y libertades de todas y de todos”.