Investido en su posición de niño burgues, un regidor del Partido Verde Ecologista de México se burló de las mujeres indígenas que acudieron a solicitar facilidades para vender sus productos y las trató de manera despectiva.
El hecho, por demás discriminatorio, llegó al ámbito de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión y desde la tribuna se exhibió a los militantes de este partido político que solo buscan posiciones políticas para vivir en condición acomodada con dinero del pueblo.
Los legisladores federales que tuvieron conocimiento de los hechos, agendaron el asunto a la tribuna de la Comisión Permanente el miércoles pasado y emitieron un punto de acuerdo que dice lo siguiente:
“Exhortamos a las autoridades del municipio de Cuernavaca, Morelos, a respetar los derechos humanos y garantías de las personas de origen indígena, así como a evitar cualquier acto de hostigamiento y discriminación hacia las mujeres indígenas”.
En el dictamen se reseña que el pasado 2 de mayo un grupo de mujeres acudió al ayuntamiento de Cuernavaca para dialogar con el alcalde Jorge Morales Barud, para que les permitiera vender sus artesanías en la calle.
Ello, porque el gobierno municipal realizó una “limpia” de comerciantes ambulantes que afectó a las mujeres indígenas.
Ahí, se denunció que el regidor Alfredo Gutiérrez, del PVEM, “se burló del grupo y se refirió a ellas de manera despectiva”.