La secretaria de la Comisión de Turismo de la Cámara de Diputados, Lizbeth García Coronado, propuso una iniciativa para prohibir los juegos de azar y de apuestas, particularmente para niños y jóvenes, toda vez que se ha incrementado el número de máquinas tragamonedas, casinos ilegales y salas de juego “piratas” de fácil acceso para ellos.
Con reformas a los artículos 1, 18, 19 y 20 de la Ley Federal de Juegos y Sorteos, se plantea prohibir la fabricación, importación, ensamblaje, comercialización y tenencia de máquinas tragamonedas de apuestas cuyo uso se destine a niños y jóvenes.
En el documento, presentado en la Comisión Permanente y enviado a la Comisión de Gobernación, la diputada precisa que actualmente la violencia social, cuyo principal generador es el narcotráfico, se ha incrementado alarmantemente y ha ingresado al sector del juego.
Se destaca que en México ha crecido el número de máquinas tragamonedas, casinos ilegales y salas de juego “piratas” que rebasaron la capacidad de control del gobierno, “muchos de ellos probablemente ligados al crimen organizado y siendo estos establecimientos de fácil acceso para los jóvenes”.
La diputada destaca en el documento, que durante los últimos años en diversos establecimientos se localizan las máquinas tragamonedas que, además de ser un negocio ilegal, propician la ludopatía entre los jóvenes
Menciona que la circunstancia de México, caracterizada por un déficit de generación de empleos y de oportunidades de desarrollo personal, favorece que parte de los desocupados se vinculen al juego clandestino.
“Los enormes volúmenes de dinero que opera la industria ilegal de juegos y los efectos que tienen sobre sectores de la población sin empleo ni oportunidades los vincula a lo ilícito y al lavado de dinero, favoreciendo la delincuencia e inseguridad”, enfatiza.
Se detalla que con la proliferación de las máquinas tragamonedas en misceláneas, miles de niños y amas de casa caen en las garras del juego compulsivo.
Por ello, la iniciativa también propone que la Secretaría de Gobernación, con el apoyo de la Procuraduría General de la República, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, las aduanas y la Procuraduría Federal del Consumidor retiren los diferentes modelos de máquinas tragamonedas de apuestas ubicadas en misceláneas, farmacias, tiendas de autoservicio o cualquier establecimiento donde se ubiquen.
A la Dirección General de Juegos y Sorteos de la Secretaría de Gobernación se le exhorta a destinar un porcentaje de las multas y sanciones que se apliquen a propietarios de máquinas tragamonedas al Instituto Mexicano de la Juventud, para fortalecer los programas, actividades y becas que dicha institución destina para los jóvenes.
Se establece que en el caso de las máquinas tragamonedas se aplicarán las sanciones de la ley, además de advertir a los propietarios de los locales que vuelvan a instalarlas que se harán acreedores al decomiso. Quien reincida se castigará con la clausura definitiva del establecimiento.