El senador Mario Delgado Carrillo, dio su respaldo a la iniciativa del Presidente Enrique Peña Nieto, de gravar las bebidas azucaradas con un peso por litro, pero dijo que lo recaudado debe destinarse al combate de la obesidad y las enfermedades derivadas como la hipertensión y la diabetes.
El legislador del PRD, recordó que desde diciembre pasado, junto con otros senadores de diferentes partidos, había propuesto un impuesto especial a los refrescos como medida preventiva de salud porque México es actualmente el primer lugar en obesidad infantil u juvenil, lo que afecta 6 millones de niños entre 5 y 11 años y más de 6 millones de adolescentes.
El ex secretario de Educación del D.F., manifestó que la medida, además de recaudatoria, debe tomarse como preventiva para la salud, pues México es el primer consumidor mundial de refrescos con un promedio de 163 litros por persona por año, cifra 40 por ciento superior al consumo promedio en Estados Unidos.
El senador, integrante de la Comisión de Hacienda, hizo hincapié en el grave problema de obesidad que padece el país con 39.05 por ciento de adultos mayores de más de 20 años con sobrepeso y 32.15 por ciento con obesidad, lo que equivale a 7 de cada 10 mexicanos.
Por todo ello, el presidente de la Comisión del Distrito Federal en el Senado de la República, respaldo el impuesto propuesto por el presidente a todos los refrescos azucarados que no aporten ningún nutrimento con calorías vacías.
Sin embargo, Delgado Carrillo, subrayó que la recaudación por este gravamen debe etiquetarse al combate de las enfermedades derivadas de la obesidad y así lograr importantes metas, como disminuir la prevalencia de diabetes en aproximadamente 12 por ciento o ayudar a disminuir en 26 por ciento de los costos de nuevos casos de diabetes en los próximos 10 años.