El Senado de la República modificó la Ley Federal de Protección al Consumidor, con el objetivo de proteger a las mujeres de la publicidad “engañosa, abusiva o que muestre estereotipos degradantes”, es decir aquella que muestre hechos, acciones, símbolos, así como expresiones que asocien características de exclusión, sumisas, racistas o de burla hacia lo femenino.
Asimismo, con esta enmienda se busca procurar la equidad y certeza entre el consumidor y los proveedores.
En el dictamen se menciona que los medios de comunicación electrónicos difunden mensajes que “abundan en una posición subordinada de las mujeres sumisas y, por lo mismo, queridas por figuras masculinas”.
Mientras que en la publicidad, se agrega, la mujer que presenta intelecto figura muchas veces como una persona inestable emocionalmente, frívola o nada tierna, “pero sobre todo con un propósito de venganza o con antecedentes de haber sido beneficiada por dejarse someter sexualmente”.
Aunado a ello, se destaca que algunos estudios han demostrado que en la mayoría de los casos la mujer aparece en los anuncios como madre o consumidora, al mismo tiempo que es aconsejada, informada o ayudada a decidir por un personaje masculino.
Basta mencionar, se apunta en el dictamen, que los medios de comunicación reportan que 80 por ciento de la categoría de personajes de “autoridad” son representados por hombres y sólo 20 por ciento de los casos son personificados por mujeres.
Los senadores consideraron que lo anterior refleja un cuestionamiento al discurso femenino contra prácticas discriminatorias, pues no contribuyen a impulsar métodos o discursos de igualdad de género.
Estimaron que este tipo de prácticas no permiten la apertura para que la mujer intervenga en el espacio público y no contribuye a procurar la equidad y certeza entre el consumidor y los proveedores.