Hay pensiones que alcanzan los 50 mil pesos

 “Tenemos el control de los bienes de la extinta Compañía de Luz y Fuerza del Centro y lo que corresponde es vender, en este momento en la licitación de electrónica que llevamos a cabo se están vendiendo bienes que no son útiles para el servicio  eléctrico. Esta subasta se lleva en línea y cada 15 días se da el resultado”.

 

Así lo informó a los diputados federales y senadores el director general del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), Sergio Hidalgo Monroy Portillo, con quienes se reunieron para conocer los detalles del proceso de enajenación de los bienes de esa rica empresa que fue liquidada por el presidente Felipe Calderón.  

El funcionario explicó que los bienes, identificados en un cien por ciento, no se han puesto a disposición de ninguna empresa privada, y el valor de inventario es de 120 mil millones de pesos, de los cuales el 80 por ciento del valor de los activos es de las subestaciones.

“No tenemos ningún problema de acordar un mecanismo para transparentar ante ustedes quiénes son los compradores de todo, aún de aquellos que vienen de procesos penales federales, compartiríamos esa información reservada para cuidar la integridad de las personas”.

En el plan estratégico hay dos decisiones fundamentales: cómo terminamos con estos bienes que son improductivos, cuándo terminaremos con la venta; y dos, qué vamos hacer con el pasivo de los jubilados, dijo.

“El SAE no tiene en sus arcas 300 mil millones de pesos; ni tiene  los 11 mil millones que necesitamos para pagar la nómina de jubilados el próximo año, tenemos los recursos para este año”.

Dijo que en 2009 la junta de gobierno de LyFC estableció un programa para levantar inventarios en tres años y “nosotros en un año pudimos hacer lo que la empresa no pudo hacer en muchos años”.

De los extrabajadores que tenían derecho a jubilación, se ha tomado el control de los expedientes de personal y son más de 500 trabajadores que lograron acreditar que cumplían los requisitos y se han incorporado a la nómina de pensionados.

“Hay pensiones que alcanzan los 50 mil pesos, en promedio, y es una obligación del Estado, están entre los 50 y 60 años y el despacho actuarial sacó el cálculo de una obligación con los jubilados de más de 280 mil millones de pesos”, precisó.

Aclaró que la relación con extrabajadores se va a seguir atendiendo sus preocupaciones tanto a los que  ya recibieron sus liquidaciones como a los que no. “Son más de 4 mil 500 millones de pesos que no se han pagado por liquidaciones porque los trabajadores no la han querido”. 

Monroy Portillo recalcó que el SAE no ha donado ni un sólo bien de la extinta LyFC, todos los bienes han tenido sólo dos destinos: se han puesto a disposición del proveedor de electricidad a la CFE y los otros son los que se tendrán que vender y la venta de éstos serán para atender las obligaciones del SAE las cuales superan por mucho el valor de los bienes. 

Al referirse a la disponibilidad presupuestal, mencionó que cuando LyFC entró en liquidación se separa el presupuesto que puede entregar la federación.

La cuenta de caja, informó es de 8 mil  millones de pesos,  el SAE tomó control absoluto de todas las cuentas de la empresa.