*Galopante pobreza

Del año 2008 al 2010 el ingreso de dinero real en los hogares mexicanos tuvo una disminución notable, especialmente en las áreas urbanas, lo que ocasionó aumento de la población que carece de acceso a la alimentación, de acuerdo con la información que reveló este viernes en Coneval.

Una síntesis del documento que se dio a conocer y que dibuja la realidad social del México actual, es la siguiente: Entre 2008 y 2010 se redujeron las carencias sociales de acceso a los servicios de salud; acceso a la seguridad social; servicios básicos en la vivienda; calidad y espacios de la vivienda, y rezago educativo. En el mismo periodo, en el contexto de la crisis económica, el ingreso real de los hogares se redujo, especialmente en las áreas urbanas. Asimismo, se registró un incremento de la población que carece de acceso a la alimentación. Como consecuencia de lo antes señalado, entre 2008 y 2010 la población en pobreza pasó de 44.5% a 46.2%, lo que representa un incremento de 48.8 a 52.0 millones de personas. En el mismo periodo, la población en pobreza extrema pasó de 10.6% a 10.4%; en términos del número de personas en situación de pobreza extrema, éste se mantuvo en 11.7 millones.

AQUÍ EL DOCUMENTO COMPLETO

El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) da a conocer los resultados de la medición de pobreza 2010 para cada entidad federativa y para el país en su conjunto, información que fortalece la transparencia y la rendición de cuentas en la política social.

La medición de pobreza, como lo establece la Ley General de Desarrollo Social, incluye los siguientes factores: ingreso, rezago educativo, acceso a los servicios de salud, acceso a la seguridad social, calidad y espacios de la vivienda, servicios básicos en la vivienda, acceso a la alimentación y grado de cohesión social.

EVOLUCIÓN DE LAS DIMENSIONES DE LA POBREZA 2008-2010

Evolución de las carencias sociales

Entre 2008 y 2010 en casi todas las entidades federativas disminuyeron las carencias de acceso a los servicios de salud, acceso a la seguridad social, acceso a los servicios básicos en la vivienda, la carencia por la falta de calidad y espacios de la vivienda, así como el rezago educativo.

Las estimaciones de 2006 y de 2008 que se presentan en este comunicado, utilizan las bases de datos dadas a conocer este mes por el INEGI, una vez que han sido expandidas conforme a las estimaciones preliminares de población realizadas por el Instituto con base en la magnitud y distribución de la población proveniente del Censo de Población y Vivienda 2010, por lo que difieren de las publicadas anteriormente.

Acceso a los servicios de salud

La falta de acceso a servicios de salud se redujo de 40.8% (44.8 millones de personas) a 31.8% (35.8 millones de personas) entre 2008 y 2010.

Las entidades federativas con mayor disminución porcentual en la carencia de acceso a los servicios de salud son San Luis Potosí (42.3%), Chihuahua (35.4%), Hidalgo (35.3%), Michoacán (31.6%) y Guerrero (31.4%). Sonora (3.7%) es la única entidad federativa donde aumentó esta carencia.

Acceso a la seguridad social

A nivel nacional esta carencia pasó de 65.0% (71.3 millones de personas) a 60.7% (68.3 millones de personas).

Las entidades federativas con mayor disminución porcentual en la carencia por acceso a la seguridad social son Nuevo León (16.0%), Coahuila (15.3%), el Estado de México (13.6%), Chihuahua (13.2%) y Aguascalientes (11.3%). Querétaro (5.3%) es la única entidad federativa donde esta carencia se incrementó.

Servicios básicos en la vivienda

A nivel nacional, entre 2008 y 2010 la carencia de servicios básicos en la vivienda pasó de 19.2% (21.1 millones de personas) a 16.5% (18.5 millones de personas).

Las entidades federativas con mayor disminución porcentual en la carencia son Nuevo León (66.4%), Chihuahua (44.0%), Puebla (29.8%), Yucatán (28.3%) y Sinaloa (27.8%) y Tamaulipas (30.9%), Tabasco (17.0%), Sonora (16.0%), Zacatecas (13.2%) y Colima (11.8%), las de mayores aumentos.

Calidad y espacios de la vivienda

En el país, entre 2008 y 2010, el porcentaje de población con carencias asociadas a la calidad y espacios de la vivienda disminuyó de 17.7% (19.4 millones de personas) a 15.2% (17.1 millones de personas).

Las entidades federativas con las mayores disminuciones porcentuales en esta carencia son Chihuahua (43.1%), Sinaloa (41.1%), Zacatecas (38.8%), Hidalgo (35.8%) y Jalisco (31.7%), mientras que las que presentan los mayores incrementos porcentuales son Baja California (27.2%), Tabasco (24.8%), Distrito Federal (19.7%) y Colima (8.8%).

Rezago educativo

El rezago educativo se redujo de 21.9% (24.1 millones de personas) a 20.6% (23.2 millones de personas) entre 2008 y 2010.

Las entidades federativas con mayor disminución porcentual del rezago educativo son Tamaulipas (16.4%), Durango (13.9%), Sonora (13.2%), Nuevo León (12.4%) y Tlaxcala (12.1%). Por otro lado, esta carencia aumentó en las siguientes entidades: Campeche (5.3%), Baja California Sur (2.3%) y Colima (0.6%).

DIIRECCIIÓN DE IINFORMACIIÓN Y COMUNIICACIIÓN SOCIIAL

Acceso a la alimentación

En el país, el porcentaje de personas con carencia por acceso a la alimentación pasó de 21.7% (23.8 millones de personas) a 24.9% (28.0 millones de personas) entre 2008 y 2010.

Baja California Sur (68.1%), Campeche (53.7%), el Estado de México (49.2%), Quintana Roo (47.2%) y Nuevo León (45.9%) son las entidades donde aumentó en mayor medida la carencia de acceso a la alimentación, aunque ésta también aumentó en otros 19 estados. Por el contrario, Guanajuato (12.4%), Morelos (12.0%), Michoacán (9.6%), Durango (8.8%) y Oaxaca (6.8%) son estados que lograron disminuirla.

Evolución del ingreso

La metodología empleada en el país para medir la pobreza incorpora dos umbrales de ingreso: la línea de bienestar, que se determina como la suma del costo de la canasta alimentaria y la no alimentaria, y la línea de bienestar mínimo, la cual es igual al costo de la canasta alimentaria. Estas líneas permiten valorar el porcentaje de personas con ingresos insuficientes para satisfacer sus necesidades básicas.

En agosto de 2010 el valor de la línea de bienestar fue de $2,114 pesos mensuales por persona en las áreas urbanas y de $1,329 pesos en las rurales. Los valores correspondientes de la línea de bienestar mínimo fueron $978 pesos y $684 pesos, respectivamente.

Las entidades federativas donde más se redujo el porcentaje de la población por debajo de la línea de bienestar son Coahuila (10.4%), Morelos (5.5%) y Puebla (2.7%). Los mayores aumentos tuvieron lugar en Baja California Sur (35.9%), Chihuahua (31.6%), Colima (28.1%), Sonora (28.1%) y Sinaloa (23.1%).

Respecto al porcentaje de población con ingresos inferiores a la línea de bienestar mínimo — umbral determinado por el valor de la canasta alimentaria—, las entidades con las mayores reducciones fueron Morelos (20.0%), Tabasco (9.9%), Quintana Roo (8.9%) y Michoacán (3.1%), mientras que los estados con los mayores incrementos fueron Sinaloa (73.4%), Jalisco (49.9%), Querétaro (46.2%), Baja California Sur (45.6%) y Chihuahua (43.9%).

La evolución del ingreso muestra un patrón diferente en las áreas urbanas y rurales: en las primeras, el porcentaje de personas con un ingreso menor a la línea de bienestar pasó de 44.8% en 2008 a 47.7% en 2010; por otra parte, en las áreas rurales pasó de 63.1% a 66.0%, en estos años.

A nivel nacional, el porcentaje de población que dispone de ingresos inferiores de la línea de bienestar aumentó de 49.0% a 52.0% entre 2008 y 2010, mientras que el porcentaje con un ingreso menor a la línea de bienestar mínimo pasó de 16.7% a 19.4%. Estos cambios se dieron en el contexto de una crisis económica mundial que afectó el desempeño económico del país.