La presidenta de la Comisión Especial para conocer y dar seguimiento a los feminicidios registrados en México, diputada Teresa del Carmen Incháustegui Romero, señaló que la tipificación de este delito es importante, toda vez que los homicidios contra mujeres aumentan en algunas entidades.
Al reunirse con los procuradores de Justicia de Tlaxcala y de Quintana Roo, a fin de conocer las acciones que han emprendido para enfrentar los homicidios contra las mujeres, detalló que “hay un piso duro de violencia extrema y feminicida contra este sector que se reduce cuando las agresiones sociales bajan”.
Mencionó que de 2007 a 2009 aumentaron en 500 por ciento las agresiones contra mujeres en cinco entidades del país, y aún persiste violencia y discriminación sistemática, así como una constante agresión institucional.
Indicó que es necesario revisar las leyes y el funcionamiento de la procuración de justicia, las políticas públicas y ver en qué medida “nuestra acción está contribuyendo a mantener un sustrato cultural y ancestral de discriminación en contra de las mujeres”.
Argumentó que una tendencia a nivel nacional es la privación de vida por el uso de armas de fuego, “a mayor circulación de armas en un país, mayor cantidad de homicidios de mujeres, y si además de esa proliferación se carece de la procuración de justicia, pues es la invitación a privar de la vida a cualquiera”.
La diputada dijo que Tlaxcala es una de las entidades en donde los feminicidios vienen creciendo, ya que tan sólo en seis municipios se concentra el mayor número de estas muertes, por lo que es necesario crear agencias especializadas e instrumentos técnicos para la investigación.
Detalló que en esa entidad el número de asesinatos por ahorcamiento, estrangulamiento y ahogamiento ha crecido en un 44.4 por ciento en 25 años. “Las formas más violentas de homicidios se están presentando en Tlaxcala en comparación con el resto del país”.
Quintana Roo, resaltó, no es un lugar como otros fronterizos, en donde se ha incrementado la violencia feminicida, pero sí hay una tendencia a la alza desde 1995 y a lo largo de 25 años se ha cuadriplicado.
“Es un tema que nos está alertando sobre una situación que debiera atenderse y evitar que por omisión de las autoridades estos eventos se comienzan a incrementar, toda vez que los municipios de Benito Juárez, Cancún e Isla Mujeres presentan los mayores casos”, manifestó.
A su vez, la procuradora de Tlaxcala, Alicia Fragoso Sánchez, reconoció que esa entidad no está fuera de la violencia que se comete contra las mujeres, de ahí que se debe dar cumplimiento a los compromisos asumidos por el Estado para proteger a este sector de la sociedad.
Subrayó que de los casos de homicidios que se erradicaron de 2002 a 2011, hay 55 averiguaciones previas. De ellos, 25 casos fueron por robos, asaltos y problemas espontáneos; 11 conflictos familiares; 8 sentimentales y en 11 se desconoce el motivo.
Tlaxcala, planteó, tiene un serio problema de trata de personas, por lo que aunado a la violencia contra las mujeres, se están tomando las acciones para prevenirlos y reducirlos, a través de protocolos de investigación ministerial.
En tanto, el procurador de Quintana Roo, Gaspar Armando García Torres, indicó que del 2003 al 2011 se cometieron en la entidad 541 homicidios dolosos contra mujeres, de los cuales el 40 por ciento han sido por violencia y ataque sexual en las zonas turísticas.
Precisó que el 56 por ciento del total de homicidios fueron contra amas de casa. Los métodos: lesiones, asfixias, sofocación, envenenamiento, calcinación y uso de armas de fuego de bajo calibre. Además se registraron 79 casos de mujeres extraviadas durante 2011, pero sólo en diez se documentó.
Destacó que en la entidad se establecerá un protocolo de investigación de servicios periciales y de impartición de justicia, a efecto de indagar todos los delitos que se relacionan con la desaparición, violencia sexual y homicidios contra mujeres.