La diputada Flor de María Pedraza Aguilera, presidenta del Comité del Centro de Estudios para el Adelanto de las Mujeres y la Equidad de Género, señaló que para atender de manera oportuna a las mujeres que sufren cáncer de mama y cervicouterino, es necesario optimizar la calidad en los gabinetes o unidades de salud y crear un registro nacional de quienes tienen este padecimiento.

Además, se requiere combatir las problemáticas de carácter técnico que presentan instituciones de salud públicas y privadas, en cuanto a la detección de la enfermedad.

Informó que presentará dos puntos de acuerdo en el próximo periodo de sesiones. El primero prevé solicitar al Ejecutivo que se garantice la calidad en las unidades de salud que prestan la función de mastografías a lo largo del país.

El segundo busca impulsar la homologación de los registros nacionales de cáncer con el propósito de llevar un control de los pacientes, además de eliminar los candados en los expediente médicos, respetando la dignidad del enfermo y concentrando los principales datos de su padecimiento.

Durante conferencia de prensa, la legisladora dijo que el Comité que preside está comprometido en trabajar de manera conjunta con las sociedades civiles a fin de crear campañas de concientización acerca de la importancia de la autoexploración y la prueba del Papanicolaou.

Mayra Galindo Leal, directora general de la Asociación Mexicana de Lucha contra el Cáncer, mencionó que el cáncer cervicouterino representa el 13 por ciento de las muertes por cáncer en todos los grupos de edad. Los estados de la República con mayores tasas de mortalidad son Chiapas, Guerrero, Morelos y Veracruz.

Aseguró que las sociedades civiles representan un papel fundamental, ya que estas organizaciones acercan a las mujeres a que se traten de manera oportuna contra el cáncer y se les invita a que utilicen el Seguro Popular, el cual atiende al 100 por ciento de los casos de este padecimiento.

Durante su intervención, Rosa Leticia Molina Gutiérrez, representante del Instituto Nacional de Radiología, dio a conocer que a causa del cáncer de mama una mujer muere cada dos horas.

Resaltó que para las campañas anuales que se realizan para la detección del cáncer se necesita personal capacitado que pueda analizar los resultados, ya que en la actualidad existen sólo 147 radiólogos especializados en detección de tumores cancerígenos.

Ante este panorama, propuso generar campañas en instituciones de nivel secundaria sobre la autoexploración y mejorar las instalaciones hospitalarias.

Por su parte, Karina Cabal, directora de Novamedic Administración Médica, expuso que anualmente registran 100 mil casos de cáncer cervicouterino, la segunda causa de muerte a nivel nacional.

Subrayó que a este mal se le conoce como cáncer de la pobreza, pues quienes lo padecen generalmente practican relaciones sexuales  a temprana edad, lo cual desarrolla la posibilidad de la transmisión del virus de papiloma humano; tienen múltiples parejas sexuales, y padecen tabaquismo, mala nutrición y falta de revisiones médicas que por la escasez  económica no pueden realizarse.

Añadió que los síntomas no son muy claros porque pueden confundirse con un diversas patologías ginecológicas, lo que propicia que el  cáncer cercicouterino sea detectado en etapas avanzadas.

Reiteró que las colposcopias y el Papanicolaou pueden ayudar a diagnosticar de manera oportuna este tipo de cáncer, además de ser   pruebas sencillas y de bajo costo.

En este sentido, sostuvo que es mejor impulsar campañas de prevención que gastar en futuros tratamientos que disminuyen la calidad de vida de las mujeres. “No sólo se deben ofrecer instalaciones médicas y tratamientos clínicos, sino fomentar la cultura de prevención y educación sexual en los jóvenes.”