Las casas de empeño se han multiplicado de manera desordenada en todo el país y no se cuenta con un registro certero sobre ellas ni de sus operaciones, pues en abril de 2009 la Profeco tenía registradas mil 449 casas, pero sólo la tercera parte de las comerciales cuentan con registro.

Así lo denunció el diputado federal Daniel Gabriel Ávila Ruiz, al señalar que de acuerdo con la Asociación de Casas de Empeño, en el país operan alrededor de cinco mil controladas por 30 grandes corporativos.

Dijo que las entidades con más casas de empeño son Veracruz, Nuevo León, Distrito Federal, Estado de México, Baja California y Sinaloa.  

Indicó que las casas de empeño, voluntaria e involuntariamente, se han convertido en cómplices y facilitadores de delitos, ya que delincuentes recurren a ellas a empeñar enseres producto de robos a casa habitación. “Levantan sospechas sobre el lavado de dinero producto de diversos ilícitos”.

Por su parte, la diputada Susana Hurtado Vallejo señaló que por ellos se busca reformar la ley respectiva para tener un mayor control de esos negocios, pero consideró necesario exhortar al presidente Felipe Calderón a expida una Norma Oficial Mexicana que determine los elementos de la información que se incluirán en los contratos de adhesión.

Propuso aclarar la definición de las casas de empeño, para que se abarquen a todas las instituciones que conforman el sector prendario y establecer en la Profeco un registro público de las mismas.