En las tres últimas décadas se cuadriplicó el número de suicidios en México, al pasar de un promedio de dos personas por cada 100 mil habitantes a 7.6, reveló el diputado Leobardo Alcalá Padilla, secretario de la Comisión de Salud.
Ante ello, presentó un punto de acuerdo en la Comisión Permanente para que la Secretaría de Salud considere al suicidio como un problema de salud pública, y elabore programas de prevención y orientación.
Mencionó que actualmente no se tiene una atención adecuada sobre el suicidio. “Tratarlo, es hablar de tabúes y de temas prohibidos”.
Conforme a cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el número de personas que se quitaron la vida durante el 2010 llegó a 5 mil 12, y en el 2011 alcanzó 5 mil 718, dijo.
“En tan sólo dos años el incremento de muertes por suicidio tuvo un crecimiento importante”, subrayó el diputado.
La población con más tendencia al suicidio está entre los 15 a 24 años de edad. Los hombres encabezan el índice de suicidios, cuatro por uno de mujeres.
Alcalá Padilla resaltó que los trastornos mentales como la depresión, ansiedad o esquizofrenia, al no ser tratados correctamente, pueden generar tendencias suicidas.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), en la actualidad un millón de personas fallecen por suicidio en el mundo, y para el 2020 este número podría incrementarse hasta el millón y medio, subrayó.
Indicó que la OMS y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) establecen que el suicidio es un problema de salud pública, debido al gran número de muertes que se presentan tanto en la región de las Américas como en el mundo entero.
El diputado Leobardo Alcalá resaltó que en México faltan más y mejores programas, así como políticas encaminadas a evitar este fenómeno ante situaciones como la violencia, pobreza, desempleo y problemas familiares y sentimentales.
Dichos factores, asociados a diversos padecimientos, pueden generar suicidios, por lo cual, la Secretaría de Salud debe establecer programas de concientización que incluyan ayuda de un psicólogo o psiquiatra para las personas que lo soliciten, consideró Alcalá Padilla.