La subprocuradora de Recursos Naturales de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, Adriana Rivera Cerecedo, informó que el 60 por ciento de la denuncia ciudadana en la Profepa está encaminada a los problemas de la tala inmoderada, la deforestación, cambio de uso de suelo y las invasiones a zonas forestales por parte de los grupos o de los núcleos poblacionales.

En reunión de trabajo con diputados federales, agregó que el combate a la tala clandestina es una situación que ocupa el 70 por ciento de los recursos económicos, administrativos y humanos de la Profepa y mencionó que el centro de la República es la zona más deprimida o más amenazada por la tala clandestina.

El cambio de uso de suelo se da por el hecho de cortar los árboles, pero en este sentido es muy importante notar que los fines de la tala clandestina pueden ser diversos: el asentamiento humano, la transformación de la madera para comercio ilegal y la plantación de otro tipo de especies que no son las forestales, precisó.

La funcionaria señaló que parte del cambio de uso de suelo de los bosques se ha dado de forma súbita por incendios provocados por asentamientos humanos irregulares, así como para cacería furtiva, en la cual provocan el incendio para que la presa salga.

“Hoy tenemos un cuidado de los bosques fortalecido con la Secretaría de Marina, Sedena, Policía Federal, AFI, Interpol y con todas las policías estatales y municipales”, subrayó.  

Consideró que deben crearse programas integrales con mejoras regulatorias y que sean accesibles para que los dueños de los bosques tengan mejor aprovechamiento de estos.