El presidente Felipe Calderón encabezó la ceremonia en conmemoración del CI Aniversario del inicio de la Revolución mexicana, donde también se rindió homenaje a Don Francisco I. Madero.
En el evento, el Presidente entregó reconocimientos por el Premio a la Trayectoria en Investigación Histórica 2011, que otorga el Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM) al Doctor Luis Villoro Toranzo, a la Doctora Antonia Pí-Suñer Llórens, a la Doctora Alicia Hernández Chávez, al Doctor José Woldenberg Karakowsky, al ingeniero Jorge Ayala Blanco y al Doctor Francisco Xavier Tavera Alfaro, a quienes felicitó por sus destacadas investigaciones, así como por su dedicación y amor por la historia de nuestro país.
Durante su discurso, el Primer Mandatario sostuvo que la Revolución cimentó un México nuevo y democrático, por lo que no sólo dejó una huella en la historia del país, sino que estableció las bases de las instituciones y cultura.
Asimismo, recordó el papel fundamental de Francisco I. Madero, “El Apóstol de la Democracia”, quien inició el movimiento revolucionario contra el régimen autoritario de Porfirio Díaz. Señaló que el fin de Madero era recuperar los derechos y libertades de la nación.
Relató que, pese a la represión a la que fue sometido, Madero alcanzó la Presidencia en 1911. Como gobernante, lo describió como un ser congruente con sus ideales democráticos, que respetó la independencia de los Poderes y a la prensa; legalizó la libertad sindical y de huelga; reorganizó el crédito agrícola y trabajó por la educación.
Asimismo, el Jefe del Ejecutivo recordó al general Emiliano Zapata, a Francisco Villa, a Venustiano Carranza y a los Constituyentes de 1917, quienes crearon un Código Supremo democrático e innovador. Adicionalmente, reconoció a las mexicanas y los mexicanos, que junto con Madero, lucharon y dieron su vida por alcanzar un México democrático, libre, justo e igualitario.
El Presidente apuntó que a nuestro país le costó mucho tiempo y sacrificios alcanzar la democracia. Afirmó que ésta no debe ser vista como una conquista de una vez y para siempre, sino como un patrimonio perfectible que debe cultivarse y preservarse.
Para finalizar, aseveró que el México actual necesita de demócratas, no sólo en las clases políticas, sino también en la sociedad. Por un lado, urgió a los políticos a trabajar por defender a la sociedad de amenazas como la violencia, criminalidad e impunidad; que sean factor de progreso económico y defiendan la libertad y efectividad del voto. Por otro lado, señaló que la sociedad debe ser el contrapeso contra la arbitrariedad y el abuso del poder, al participar vigorosa y activamente, al tener una prensa libre y objetiva, y contar con una sociedad civil informada y organizada.
Más tarde, el Presidente asistió al tradicional desfile conmemorativo por el CI Aniversario de la Revolución Mexicana, que partió del Centro Histórico, pasó por Paseo de la Reforma y culminó su recorrido en el Auditorio Nacional. El General Jiménez López explicó que desfilaron cuatro banderas y estandartes, siete mil 180 miembros del Ejército y la Fuerza Aérea mexicana, así como 60 agentes de Seguridad Pública del Distrito Federal y el Estado de México. Participaron también 56 atletas de la Comisión Nacional del Deporte, entre ellos varios medallistas de los Juegos Panamericanos, así como 30 integrantes de la Asociación Nacional de Charros y 775 caballos. Durante el evento, realizaron una exhibición diez aeronaves, participaron siete vehículos a motor, una locomotora de exhibición y una aeronave de exhibición. Por último, el General explicó que el desfile concluyó sin novedad.