Marea roja en México
Con el objetivo de conocer las causas de muerte de cientos de aves y mamíferos marinos que quedaron varados al norte del Golfo de California, investigadores del Departamento de Oceanografía Biológica del CICESE, centro público de investigación cuya directorio nacional forma parte de la mesa directiva del Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCyT), implementaron una campaña inmediata de monitoreo la semana pasada, tras el suceso.
Coordinados por el doctor Ernesto García, y en colaboración con la Facultad de Ciencias Marinas de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) y la Procuraduría Federal de Protección al ambiente (PROFEPA), los científicos que participaron en la campaña documentaron la presencia de organismos marinos muertos, en su mayoría aves conocidas como pato buzo, en la zona costera de 80 kilómetros entre San Felipe y Puertecitos.
La muerte de estas aves, reportada por la PROFEPA el 13 de enero, fue el indicador de la presencia de un agente nocivo que obligó a prohibir la extracción de organismos acuáticos para consumo humano, veda que afecta la producción del sector económico de la región.
La campaña de monitoreo consistió en la toma de muestras de agua marina, así como biopsias de las especies muertas, que permiten comprobar si el evento fue provocado por un florecimiento algal nocivo (FAN), fenómeno conocido comúnmente como “marea roja”, en el que se pueden presentar ficotoxinas (moléculas de origen vegetal) capaces de afectar a otros organismos.
Según informaron algunos pobladores, no se había visto una mortandad así en la región. Durante el muestreo, se contabilizaron, aproximadamente, 350 organismos muertos en un área de playa de 700 metros.
Actualmente, el equipo de investigadores de esta campaña, conformado por los doctores Ernesto García, Ma. Carmen Ruiz (IIO – UABC), David Rivas (Oceanografía Física - CICESE) y estudiantes de posgrado, analizan muestras de agua de diferentes profundidades y biopsias de pato buzo y delfines para encontrar la causa real de este evento extraordinario y saber qué tipo de toxinas estuvieron presentes durante la marea roja.
Durante las disecciones de varios patos se encontró el buche (bolsa donde acumulan el alimento) lleno de sardina, especie vector de las toxinas hacia estos organismos, es decir, el que las transmite.
En el presente evento, se encontró en almeja generosa una alta cantidad de saxitoxinas producida por la microalga Gymnodinium catenatum, la cual no afecta a los moluscos, pero sí al consumo humano.
Las saxitoxinas generan parálisis muscular, cuyos efectos van desde entumecimiento de labios, manos y pies hasta paro respiratorio. No se han reportado intoxicaciones en Baja California; sin embargo, en las costas de Sinaloa, Guerrero y Oaxaca hubo pérdidas humanas en la década de los 80 por la presencia de este tipo de toxina.
Existe conocimiento sobre la presencia de toxinas de tipo paralizantes (saxitoxinas) en la zona, debido a que se han realizado investigaciones en almeja generosa por el doctor García, coordinador de la nueva Red de Investigación sobre Florecimientos Algales Nocivos (RedFAN) y personal del laboratorio FICOTOX(*), específicamente se han desarrollado dos tesis relacionadas a la temática. Desde 2010 han monitoreado muestras de agua y ejemplares de almeja para conocer si este molusco presenta ficotoxinas, evaluación requerida para su exportación.
En muestras de agua analizadas la semana pasada se registró una acumulación de Gymnodinium catenatum de aproximadamente 190 mil células por litro, lo cual originó la implementación de la campaña de monitoreo, ya que no habían registrado abundancia celular tan alta en muestreos anteriores.
La causa de esta acumulación de células no es conocida, pero El Dr. García comentó que la contaminación es una hipótesis que no debe ser descartada. Este evento también pudo ser ocasionado por fenómenos como El Niño o La Niña, ya que la presencia de fuertes lluvias y cambios repentinos de las condiciones naturales, como los deslaves, alteran los nutrientes que desembocan en el agua y promueven el crecimiento y acumulación de ciertas especies de fitoplancton.
Este estudio aportará información importante en el ámbito del conocimiento básico y también servirá para la toma de decisiones que permitan mitigar los efectos nocivos de florecimientos algales similares.
El monitoreo continuará mediante análisis semanales de muestras de agua para evaluar la presencia del organismo potencialmente tóxico y medición de toxinas acumuladas en almeja generosa.
Este evento ha despertado mucho interés para la RedFAN, como proyecto de reciente creación, que tiene como objetivo promover ciencia básica de excelencia en la temática, establecer vinculación con los sectores involucrados y con los encargados de las toma de decisiones. La ventaja de esta red es que pueden integrar personas interesadas en el tema, aunque no sean investigadores. La invitación está abierta al sector productivo y de salud para coordinar acciones y esfuerzos de manera puntual.
La RedFAN, que es una entidad reconocida por el CONACYT, y eventualmente será financiada por este consejo, tiene el compromiso en los siguientes dos años de elaborar el Plan Nacional de Investigación sobre Florecimientos Algales Nocivos, que identifique las necesidades de atención de la problemática relacionada con estos fenómenos.
(*)Ficotox (CICESE) es un laboratorio de servicios, investigación y monitoreo de ficotoxinas marinas asociadas a florecimientos algales nocivos, donde se ha implementado la técnica analítica de cuantificación de este tipo de toxinas (resultados en menos de dos horas), además del protocolo considerado en la Norma Oficial Mexicana (bioensayo en ratón).