La diputada federal Teresa del Carmen Incháustegui Romero acusó a la Secretaría de Educación Pública de desentenderse de una de las tareas fundamentales para el país, como lo es alimentar a las nuevas generaciones de escenarios constructivos y no destructivos.

“La violencia social que estamos viendo en el país empieza desde las escuelas y las casas y estamos teniendo una niñez violenta y adicta, porque no estamos haciendo lo que debemos”, expuso la legisladora. 

Consideró que se debe centrar la atención en las mujeres que sufren cualquier tipo de violencia, que implica al 57 por ciento de ellas.

En respuesta a esta grave acusación, Juliette Bonnafé, coordinadora de Seguimiento y Vinculación Institucional de la SEP, detalló los objetivos de los programas que se llevan a cabo en la dependencia, pero aprovechó para solicitó mayores recursos que permitan el diseño y aplicación de políticas de equidad de género.

Además, aclaró que se requiere más presupuesto en la educación básica sin fronteras; para capacitación al magisterio y prevenir la violencia contra las mujeres y niñas; y para programas académicos con enfoque de género para universidades públicas en las entidades federativas.  

Subrayó que para el país es de vital importancia profesionalizar a los maestros en materia de derechos humanos, equidad de género y prevención de la violencia; seguir apoyando con estudios a las menores embarazadas, a fin de llegar a la meta de 49 mil 460 becas en 2012; intensificar los programas de anticoncepción y planificación familiar.