Por Guillermo Pimentel Balderas
El presidente del Consejo Nacional de Productores de Arroz de México, A. C (CONAPAMEX), Pedro Alejandro Díaz Hartz, señaló que en la actualidad la agricultura nacional no necesita de recetas ni de recomendaciones, sino que demanda la generación de nuevas tecnologías y el desarrollo de capacidades en los productores, principalmente en los jóvenes para incentivarlos, y hagan carrera en el sector agropecuario, en lugar de emigrar a las ciudades o el extranjero.
En el marco de la inauguración del Taller de Formación Técnica en el sistema de alta productividad a productores líderes, técnicos agrícolas y profesionistas de supervisión y acompañamiento, que estuvo a cargo de la directora general adjunta de Evaluación y Certificación del INCA-RURAL, Leticia Guadalupe Barrón Estrada, representante personal de la directora general del INCA-RURAL, Ligia Noemí Osorno Magaña, el líder arrocero urgió a las autoridades encargadas de atender al agro, rescatar al campo del envejecimiento en que se encuentra, por la migración de los jóvenes a buscar mejores oportunidades, así como aterrizar los subsidios y apoyos en forma suficiente y oportunos.
Díaz Hartz, considero que es tiempo de ir haciendo la transición del relevo generacional y además reclamar un extensionismo que considere los intereses y la opinión de los productores, no solamente de arroz, basado en un aprendizaje conjunto, ya que es el camino más corto hacia un desarrollo sustentable en el agro mexicano y este es mediante el fortalecimiento de la relación Técnico-Agricultor.
Con la asistencia como invitado especial del presidente de la Confederación Nacional de Productores Agrícolas de Maíz de México (CNPAMM), Carlos Salazar Arriaga, el presidente de CONAPAMEX, expuso: “De nada sirve tener conocimiento y no difundirlo; tener experiencia y no compartirla. Creo que es y deberá ser la premisa para el esquema que la SAGARPA tiene para un campo nuevo y tecnificado”.
El dirigente arrocero indicó que cuando el productor entiende que la tecnología y las estrategias propuestas le ayudarán a mejorar su rentabilidad y al mismo tiempo contribuye a resolver y a enfrentar los desafíos de mayor magnitud, como la demanda de alimentos, por la creciente población , la escases de agua, la baja fertilidad del suelo, el agotamiento de los recursos no renovables, la contaminación y el cambio climático, así como otros fenómenos, le resultara más fácil adoptar las técnicas propuestas.
Explicó que los técnicos y profesionistas que se capacitaran en este Taller, llevarán sus experiencias a cerca de mil productores del Programa de Desarrollo de Capacidades y Extensionismo Rural de la SAGARPA, manejado por el INCA-RURAL, en ochos estados productores del cereal –Campeche, Veracruz, Morelos, Tamaulipas, Guerrero, Michoacán, Jalisco y Nayarit-, con el Programa de Alta Productividad en el Cultivo de Arroz.
“Para mí, en lo personal, es el punto de encuentro entre la agricultura y la tecnología; lo teórico con lo práctico; lo empírico con la ciencia, y los sueños con la realidad. Es justamente la relación entre el técnico y el agricultor, por lo que es importante reconocer, primero, que tanto técnicos necesitan de la experiencia de los productores, como los productores requieren de los conocimientos de los técnicos”, subrayó.
Aseveró que una vez que se reconoce y acepta la importancia de los actores, es posible entablar una relación de trabajo y de cooperación en la que enfrenten juntos los retos y desafíos que hoy depara la agricultura, y muy especialmente a los granos básicos, como el arroz, que es un alimento primordial en la dieta del mexicano y básico en la Cruzada Nacional contra el Hambre, que propuso el presidente de México, Enrique Peña Nieto.
Díaz Hartz dijo que debe haber más congruencia entre las dependencias gubernamentales, debido a que por un lado se pide al campesino fomentar la productividad y la siembra de cultivos mexicanos, como el arroz, y por el otro se mantienen abiertas las fronteras a productos extranjeros, pero sin arancel, a lo cual consideró injusto.
Lamentó que hoy el arroz importado acapara el 80 por ciento del mercado nacional y permitir que entre más y más cereal de un país – Pakistán- con restricción sanitaria y sin arancel, lo cual dijo, no es aceptable. Agregó, que la entrada del alimento importado ha acabado con la producción nacional. “La gente ha dejado la actividad y ahora que está bien el precio traen producto con gorgojo”, acotó.
Encabezaron también este evento: Ricardo Emilio Sosa Luna, capacitador de Financiera Rural; Federico Ramírez Rodríguez, presidente del Centro de Servicios Empresariales del Sector Arrocero, entre otras personalidades.