Es necesario que el comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Salvador Beltrán del Río Madrid, revise y actualice las medidas y políticas que se aplican para proteger a niños y adolescentes deportados de Estados Unidos, señaló el diputado Héctor Pedraza Olguín.
En su calidad de integrante de la Comisión de Población, Fronteras y Asuntos Migratorios indicó que según datos del INM y del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), el año pasado aproximadamente 17 mil 500 niños mexicanos cruzaron, sin ningún adulto, ilegalmente a Estados Unidos.
De ese grupo 855 tiene entre 14 y 17 años y en su mayoría es población originaria de los estados de Jalisco, Michoacán y Guanajuato.
Los niños migrantes que viajan solos, agregó, sufren regularmente agresiones de tipo sexual, laboral, psicológica y son el grupo más vulnerable frente a los narcotraficantes que los reclutan para vender, transportar y consumir drogas.
En este sentido, la Procuraduría General de la República en 2010, a través de la Unidad Especializada en Investigación de Tráfico de Menores, Indocumentados y Órganos inició 83 averiguaciones previas por el delito de tráfico y desaparición de menores de edad.
Pedraza Olguín resaltó que la migración de este grupo social en México muestra una realidad muy cruda, debido a las condiciones de pobreza en las que viven.
Refirió que en el informe La migración infantil, un problema acuciante, elaborado en la Cámara de Diputados, de enero a septiembre de 2009 un total de 21 mil 220 menores mexicanos fueron repatriados desde Estados Unidos, de los cuales 13 mil 110 regresaron sin compañía y 8 mil 110 con algún familiar, y que la mayoría migra para trabajar; sin embargo, al no estar debidamente preparados, se exponen a ser engañados y explotados.
Mientras que la Secretaría de Relaciones Exteriores señala que en 2009 fueron repatriados un total de 25 mil 993 niños y adolescentes desde los Estados Unidos a México, de los cuales 15 mil 561 viajan solos. De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Migración, publicadas en enero, EU deportó durante 2010 a 19 mil niños y adolescentes y un gran porcentaje de ellos migraron solos.
Por ello, presentó un punto de acuerdo para que el Instituto Nacional de Migración, a través de su comisionado, tome las medidas necesarias para revisar y actualizar las acciones y políticas que se aplican para proteger a los niños y adolescentes y en especial tratándose de menores indígenas, que son deportados de Estados Unidos.
En el documento que analiza la Comisión de Población, Fronteras y Asuntos Migratorios se resalta que hay una escasa capacitación y falta de profesionalización del personal que tiene la responsabilidad de atender a los niños, niñas y adolescentes por parte del INM.
Se menciona que en principio los menores reciben atención médica, valoración social y psicológica, revisión jurídica, alojamiento, alimentación y traslado; sin embargo, apenas se cuenta con 340 agentes tanto en el norte como en el sur del país.
“El interés y respeto de los derechos de los niños migrantes y en especial cuando se trate de menores provenientes de comunidades y pueblos indígenas, deben incorporarse de manera firme y decidida en los programas y acciones de las autoridades responsables de su aplicación”, finaliza el documento.