Marisela Morales Ibañez, quien se convierte en la primera mujer que ocupará el cargo de Procuradora General de la República, ofreció a los senadores que se convertirá en la fiscal de hierro que requiere el país y la propia dependencia.

Aquí sus palabras textuales en la reunión que tuvo con los senadores: “Si ustedes resuelven aprobar esta designación fortaleceré a esta institución fundamental para la vigencia del estado de derecho y para la protección y promoción de los derechos humanos. Conozco, valoro y reconozco el trabajo constante del Poder Legislativo para que las leyes se adapten a las cambiantes necesidades sociales.

“Ofrezco mi colaboración respetuosa, cada vez que ustedes así lo requieran, para llevar a buen puerto las iniciativas que están en el ámbito de la Procuraduría General de la República y que se encuentran pendientes de aprobación por el Congreso de la Unión.

“Uno de los cambios más importantes en el México contemporáneo, del que ustedes fueron autores destacados, fue la reforma del Sistema de Justicia Penal, con ella la procuración de justicia vive una etapa de transición para evolucionar del sistema inquisitivo mixto al acusatorio adversarial. Para hacerla realidad será imprescindible trabajar en la adaptación de la práctica ministerial, la investigación policial y el trabajo pericial.

“La tarea no es menor, pues significa cambiar inercias y mentalidades, sobre todo actuar con un compromiso con la verdad y hacer efectiva la presunción de inocencia con protocolos claros y procedimientos sencillos que no se presten a la duda o a la interpretación. En la Procuraduría General de la República cumpliremos nuestros compromisos con la reforma del Sistema de Justicia Penal.

“Si ustedes consideran que tengo el perfil y la capacidad para ser Procuradora General de la República me propongo trabajar en tres ejes centrales: el primero es el fortalecimiento institucional, reivindicar la función constitucional del Ministerio Público Federal será premisa para conservar la paz, la libertad y el patrimonio de los ciudadanos. Iniciaremos la reconceptuación del sistema de profesionalización de ministerios públicos, peritos y policías con criterios transparentes para medir la eficacia en el desempeño, otorgar estímulos y ascenso, y eliminar aquellos aspectos que permiten encubrir ineficiencias.

“No se dará espacios para la corrupción de los servidores públicos en la procuración de justicia. Quien traicione la confianza se la aplicarán con el máximo rigor las consecuencias de ley que correspondan, quien no tenga la aptitud para desempeñarse en el cargo tendrá que dejarlo.

“Me propongo dar atención especial a los mecanismos de reclutamientos y formación de agentes del Ministerio Público de la Federación. Hasta ahora hemos esperado a que los jóvenes con esta vocación se acerquen a la institución a partir de convocatorias específicas.

“Ha llegado el momento de diseñar una estrategia que nos permita captar a jóvenes bien preparados y dispuestos a servir a su país en la procuración de justicia. De manera similar debemos incrementar el número de policías y peritos, habremos de reconstituir la Policía Ministerial y potenciar su actuación mediante la depuración de cuadros y el establecimiento de directrices específicas y objetivos concretos.

“En conjunto, impulsaremos la transformación de la Procuraduría General de la República mediante un nuevo enfoque de especialización con esquemas integrales. Redefiniremos el marco de operación de las delegaciones en las entidades federativas para que su tarea ministerial sea más efectiva y activa en la persecución y castigo del delito.

“Se rediseñará su organización y su vinculación con las áreas centrales de la institución a través de la conducción por grupos de delitos. Como demanda la sociedad reforzaremos las áreas de combate al secuestro, trata de personas y lavado de dinero con más ministerios públicos y mejor capacitados en coadyuvancia con las entidades federativas para mejorar el combate a estos delitos y la atención a víctimas”.