México ostenta hoy el tercer lugar en el orbe como receptor de remesas, plantearon expertos participantes en el Coloquio Impactos de la reciente crisis económica en la migración internacional. El 63 por ciento de la población de origen latino en Estados Unidos es mexicana.
Entre 2007 y 2010 se registró una pérdida de siete millones de empleos en EU. De ellos, 400 mil correspondieron a fuentes de trabajo ocupadas por migrantes connacionales. Además, la Unión Americana deporta diariamente a mil mexicanos, refirieron.
Al inaugurar el foro, Estela Morales Campos, coordinadora de Humanidades de la UNAM, destacó que el tema es fundamental en nuestros días, por ser un fenómeno que involucra a todas las regiones del orbe.
Actualmente, ninguna nación escapa a tener migrantes en otros territorios o a recibirlos. Por ello, es necesario indagar sus múltiples causas y dialogar al respecto.
Silvia Núñez García, directora del Centro de Investigaciones sobre América del Norte (CISAN), instancia organizadora, junto con la Red Metropolis para el Estudio de las Migraciones, sostuvo que la vocación de México debe ser global, independientemente de avizorar soluciones a los problemas en la relación con Estados Unidos, que ha mantenido la supremacía militar y económica en el orbe.
Asimismo, dijo que este asunto sigue atrapado en una discusión acerca de las relaciones centro-periferia. Por ello, la entidad universitaria impulsa líneas de investigación que construyan un enfoque integral para su abordaje.
La crisis financiera global modificó los flujos migratorios entre distintas naciones, con efectos alrededor del mundo. Las repercusiones económicas de estos movimientos poblacionales son de las más significativas de la recesión global, aseguró Howard Duncan, presidente ejecutivo de la Red, espacio académico de investigación, en la que convergen expertos de más de una veintena de países.
Es necesario reflexionar acerca de cómo sus nuevas tendencias pueden incidir, a futuro, en la reconstrucción de la economía mundial. Este fenómeno, aunado al impulso a la innovación y el empuje de la gente joven, puede representar una opción para afrontar los desafíos que plantea el futuro, sostuvo en el coloquio.
México, detrás de China e India
En su participación, Elaine Levine, del CISAN, indicó que México está sólo detrás de China e India en cuanto a la recepción de remesas, y citó que el 94 por ciento de los mexicanos que emigran, lo hacen a Estados Unidos.
“¿Qué factores de empuje tendrán para migrar al vecino país, si más del 50 por ciento de su población vive en la pobreza?”, cuestionó.
Levine indicó que el 63 por ciento de los migrantes de origen latino residentes en EU son mexicanos, y en su mayoría se asientan en el suroeste de ese territorio, y los principales empleos que desarrollan son en: carpintería, construcción, jardinería y servicios.
Ante este panorama, añadió, debe realizarse un esfuerzo para alcanzar una reforma migratoria, aunque ponderó que ésta, en las actuales condiciones, no parece factible.
En su oportunidad, Bernd Geiss, sociólogo y economista de la Universidad de Frankfurt, comentó que Europa no es un gran jugador en esta materia, porque se manifiesta mayoritariamente de manera doméstica. Hasta el 2010, tres mil 670 mexicanos habían migrado a Alemania, en su mayoría como estudiantes o cursantes de idiomas.
En tanto, Imelda Nicolás, presidenta de la Comisión de Filipinos en el Exterior, manifestó que nueve millones de sus compatriotas se encuentran en otro país en búsqueda de mejores condiciones de vida; de ellos, sólo 4.4 millones permanecen en los territorios destino. Las remesas representan el 10 por ciento del Producto Interno Bruto de Filipinas, y el 50 por ciento de ese monto proviene de Estados Unidos.