El diputado Alberto Anaya Gutiérrez impulsa una iniciativa que reforma el artículo tercero constitucional, para que el Ejecutivo federal determine los planes y programas de estudio de la educación inicial, como sucede actualmente en preescolar, primaria, secundaria y normal para toda la República.

La educación inicial es la que reciben niñas y niños menores de seis años de edad. Su objetivo es potencializar su desarrollo integral y armónico, en un ambiente rico en experiencias formativas, educativas y afectivas.

Presidente del Comité de Evaluación de la Gestión y Operación del Centro de Desarrollo Infantil (CENDI) "Antonia Nava de Catalán”, Anaya Gutiérrez propone también la reforma al artículo 50 de la Ley General de Prestación de Servicios para la Atención, Cuidado y Desarrollo Infantil, para que la Federación, los estados, municipios, el Distrito Federal y los órganos político-administrativos autoricen la apertura de Centros de Atención Infantil, cuando los integrantes cumplan con la formación académica.

México ocupa el último lugar en nivel educativo entre los 34 países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), recordó el legislador.

Declaró que entre las causas más trascendentes está la falta de programas académicos que cubran las necesidades físicas, psíquicas, emocionales e intelectuales de cada nivel de enseñanza.

La educación inicial es una de las más desatendidas en lo que respecta a la planificación de materias y contenidos, pues no cuenta con los instrumentos y el material necesario que los maestros requieren para desempeñar una óptima labor profesional “dentro de tan sensible e importante nivel escolar”, señaló Anaya.

La finalidad de implementar planes de estudio especializados desde la educación inicial, aseveró, es lograr en los niños un estado emocional positivo y garantizar una mejor organización del proceso educativo, evitando esperas de tiempo innecesarias e inactividad, lo que provoca irritabilidad y fatiga.

De aprobarse la aplicación de estos planes de estudio, dijo, se dará la pauta para permitir a los educadores dedicar a las niñas y niños mayor tiempo y brindarles las más diversas actividades a medida que se van incorporando a su grupo.

De igual forma, indicó, se logrará proporcionar apoyo afectivo y seguridad a la niña o niño para que se sienta aceptado y ayudado por los adultos que lo rodean.

Por ello, Anaya Gutiérrez propone que la Fracción III del Artículo 3°establezca lo siguiente:

“Para dar pleno cumplimiento a lo dispuesto en el segundo párrafo y en la fracción II, el Ejecutivo federal determinará los planes y programas de estudio de la educación inicial, preescolar, primaria, secundaria y normal para toda la República. Dichos Planes de estudio integrarán las materias y conocimientos específicos que requiera cada nivel académico. Para tales efectos,…”

Y la reforma al Artículo 50 de la Ley General de Prestación de Servicios para la Atención, propone:

“X: Contar con documentos que acrediten la formación académica, la aptitud y capacitación requerida de las personas que prestarán los servicios”.

La OCDE indica que en México, de cada 100 niños en nivel primaria sólo 62 la terminan; 45 concluyen la secundaria y 27 el bachillerato; 13 terminan la licenciatura, y sólo dos o tres harán un posgrado.

México destina el 6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) a la educación, cifra similar al promedio de la OCDE. Datos del estudio “Panorama de la Educación 2012” indican que el 91.7 por ciento de los recursos presupuestales se destinan al pago de salarios.