La Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales aprobó el dictamen a la iniciativa para la sustitución total del uso de bolsas de plástico por materiales biodegradables que los establecimientos mercantiles empleen para ellos o que otorgan a sus clientes.
El documento establece que queda prohibido a nivel nacional la recolección, transportación o almacenamiento de residuos a través de bolsas o empaques fabricados con plástico, salvo en aquellas situaciones que por asepsia o higiene, sea inviable la sustitución de estos productos.
Las disposiciones del dictamen que reforma la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos, incluyen medidas para que las industrias utilicen insumos biodegradables o materiales que cumplan con criterios de sustentabilidad.
Agrega que, en caso de ser necesario, se prevenga la utilización de insumos que sean altamente contaminantes y de difícil aprovechamiento, ya sea por la imposibilidad de reintroducirlos en los ciclos productivos o porque la naturaleza sea incapaz de asimilarlos debido a su composición, como es el caso del poliestireno expandible.
Refiere que Greenpeace y el Fondo Internacional para la Protección de los Animales y su Hábitat (IFAW, por sus siglas en inglés) calculan que una bolsa de plástico tarda entre 400 y mil años en degradarse, dependiendo de su tamaño y peso.
De acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) se estima que diariamente se consumen 20 millones de bolsas de plástico en el país.
Así también, la industria reporta 400 mil toneladas de plástico producidas por año y aseguran que existe piratería que llega de China u otros lugares que no está en estos números y se desconoce la cantidad.
La Semarnat refiere que el 72 por ciento del total de las bolsas producidas en el país se distribuyen en tiendas de conveniencia, así como entre pequeños negocios dedicados a la venta de bolsas al mayoreo, cuyos principales clientes son los comerciantes de mercados, tianguis y tiendas de abarrotes; el 28 por ciento restante se concentra en 38 cadenas de supermercados.
Estos datos señalan la magnitud del problema que urge atender, por lo que en los últimos años han surgido empresas enfocadas a la producción de bolsas “amigables” con el medio ambiente, conocidas como biodegradables, se precisa en el documento.
Se agrega que estos productos son elaborados a base de almidón de soya, papa y oleaginosas; y una de sus principales características es su nivel de degradación, en un plazo de 90 a 180 días.
Aunque su costo de producción es mayor al de las bolsas de plástico, los beneficios que genera a la población son significativos en el largo plazo, se enfatiza.
Se añade que para el investigador Álvaro Rodríguez los industriales del plástico la fabricación de bolsas recicladas y biodegradables representa, a la vez, una nueva oportunidad de crecimiento.
A ello se suman las aportaciones científicas del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav) referente al empleo de materiales orgánicos en el desarrollo de bolsas, platos y cucharas. Ha demostrado inclusive que los productos a base de almidón de maíz tardan entre 3 y 12 meses para degradarse.
Además, la degradación de los productos biodegradables no “generan gases tóxicos al medio ambiente, ya que únicamente emiten oxígeno y bióxido de carbono”.
En los últimos años ha sido evidente que las principales tiendas de descuento en el país están adquiriendo este tipo de bolsas en múltiples colores para las amas de casa, se puntualiza.