*Desde diciembre del 2010

El Senado de la República exhortó al presidente Felipe Calderón a que, a través de la Secretaría de Salud, informe sobre las actividades y resultados del Consejo Nacional para la Prevención y Control del SIDA (CONASIDA).

Le exigen las cifras nacionales de personas contagiadas y fallecidas por este virus, así como de los programas gubernamentales de promoción de la salud sexual y prevención de esta enfermedad.

El dictamen aprobado corresponde a una propuesta que presentaron en diciembre de 2010 los senadores José Luis Máximo García Zalvidea y Rubén Velázquez López, quienes afirmaron que el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA) se ha convertido “en un problema de salud pública muy complejo, con múltiples repercusiones psicológicas, sociales, éticas, económicas y políticas, que constituye una amenaza para la seguridad nacional y el desarrollo económico y social de las naciones”.

Indicaron que la pobreza y la falta de educación sexual “están íntimamente relacionadas con el avance de la epidemia, por lo que se busca que todas las acciones en la materia se vinculen con el desarrollo social y económico del país”.

El documento avalado por los senadores enfatiza que la epidemia del SIDA en México está fundamentalmente asociada a la trasmisión sexual, ya sea con preferencias homosexuales, bisexuales o heterosexuales, ya que este tipo de trasmisión ha sido la causante de más del 90 por ciento de los casos acumulados.

Señala que en la actualidad no hay cura para la enfermedad, por lo que “la lucha contra el VIH/SIDA en México se sustenta en el fortalecimiento de las políticas de prevención, que incluyen la educación sexual, los métodos para evitar el contagio, como el uso del condón, el acceso universal a los medicamentos antirretrovirales, y el combate al estigma y la discriminación asociados a este padecimiento”.

El objetivo final de estas estrategias, se indica, es disminuir la transmisión del VIH en los grupos más vulnerables y evitar que se extienda a la población general.