México recibe cada año casi 400 mil toneladas de pierna de cerdo proveniente de EU, desplazando a 300 mil vientres, que representan alrededor de 30 por ciento del mercado nacional.

Por ello en unas semanas porcicultores mexicanos podrían reiniciar el proceso legal contra Estados Unidos por prácticas desleales en la comercialización de carne de cerdo, que ha provocado el estancamiento del sector y el desplazamiento de los cárnicos mexicanos, señaló la Confederación de Porcicultores Mexicanos (CPM).

De acuerdo con la organización, la importación desmedida y a precios dumping de carne de cerdo proveniente de EU se refleja en que, mientras los costos de producción de partes como la pierna, son de alrededor de 50 pesos el kilo, entra a México en 23. Ello ha provocado grandes pérdidas en el sector, ya que esa pieza representa la cuarta parte del cerdo.

Ya que EU se interesa sobre todo por el costillar de cerdo para abastecer su mercado interno, exporta la pierna —considerada por aquel país un subproducto— por debajo de los costos de producción. Cada año, México recibe casi 400 mil toneladas de pierna de cerdo proveniente de EU, lo cual, apuntó la CPM, desplaza a 300 mil vientres, que representan alrededor de 30 por ciento del mercado nacional.

Al respecto, el presidente de la CPM, José Luis Karam Inclán, aseguró que “hay argumentos para que las autoridades federales y en especial la Secretaría de Economía, revise no sólo el nivel de importaciones sino el precio al que entran al país”.

Aunque señaló que al cierre de 2013 el crecimiento del sector se mantuvo en 1.3 por ciento, el promedio de los últimos años, Karam Inclán confía en que al cierre de 2014 el crecimiento podría alcanzar 3 por ciento, debido al incremento en el consumo interno y al crecimiento de las exportaciones de carne de cerdo mexicana.

Agregó que este año se efectuarán grandes inversiones en proyectos de rastros TIF, salas de corte, obradores y principalmente en el proyecto sobre crecimiento de vientres, lo cual —dijo— permitiría incrementar la productividad.

Asimismo, destacó que la industria porcícola en México —cuyo valor asciende a 45 mil millones de pesos— es tanto una ventana de oportunidad para combatir el hambre como para incrementar la producción de proteína animal que no debe faltar en la mesa de los mexicanos.

Con información de revista digital 2000 Agro