*Acusa el senador Navarrete
El coordinador de los senadores del PRD, Carlos Navarrete Ruiz, aseguró que quedó demostrado que al PRI le preocupa más cuidar la elección del Estado de México que aprobar las reformas pendientes en la Cámara de Diputados.
Dijo esto luego de que se vislumbrara la posibilidad de llevar a cabo un periodo extraordinario de sesiones, una vez concluidos los comicios que se llevarán a cabo en la entidad mexiquense.
“Ellos (PRI) se han convertido en el principal obstáculo para hacer prosperar los temas pendientes de la agenda legislativa”, señaló el senador Carlos Navarrete, en referencia al posible acuerdo entre la Secretaría de Gobernación y la dirigencia nacional priista para llevar a cabo un periodo extraordinario en el Congreso.
“Es un hecho, cuidan el Estado de México, cuidan el 2012 y lo hacen por una razón: priva en el PRI un ambiente de optimismo y de euforia que ya se sienten tomando posesión de la Presidencia el 1 de diciembre de 2012 y, por lo tanto, dicen: ¿para qué hacemos reformas ahora? Las vamos a hacer cuando nosotros tengamos todo el control en el 2013”, explicó.
El coordinador de los senadores del PRD manifestó que es el PRI nacional quien tiene que dar explicaciones a la población mexicana por no aprobar temas pendientes de suma importancia, como la reforma política.
“El PRI en la Cámara de Diputados ha frenado cualquier posibilidad de avanzar en el régimen democrático, pues de no aprobarse la reforma política habría un gran retroceso, porque esta ley contempla avances significativos por los que se ha luchado durante muchos años”, señaló.
El legislador del PRD también criticó que el titular del Ejecutivo, en sus recientes declaraciones, no señale con nombre y apellido a quienes bloquearon la Ley laboral, pues ahora que, según el senador, el PAN ha retirado el apoyo a la fracción del PRI para aprobar esta reforma, el mandatario además, tendría que pedirle cuentas a su propio partido.
En este sentido, el senador Carlos Navarrete aseguró que desde el Senado de la República estarán pendientes de cualquier intento del PRI y PAN por avalar una reforma laboral en detrimento de los derechos de los trabajadores.
Ni el Ejecutivo ni el PRI están en condiciones de imponer una reforma laboral, ni mucho menos presionar para que se apruebe fast track, “ya que con ello habría repercusiones económicas y sociales por una mala decisión al respecto”, advirtió Carlos Navarrete Ruiz.