Los senadores panistas Marcela Torres Peimbert y Juan Carlos Romero Hicks propusieron añadir un artículo 24 Ter a la Ley General de Educación, a fin de facultar a la Secretaría de Educación Pública (SEP) a aumentar la actividad física en los planteles educativos, así como generar políticas para la promoción efectiva de ésta en los educandos.
Detallaron que los lineamientos a los que se refieren en el artículo 24 Ter serían: Ser socialmente inclusivos y participativos; incluir los criterios de actividad física, que para tal efecto determine la Secretaría de Salud; considerar las realidades estatales y municipales, que pueden diferir dependiendo de los recursos financieros, cuerpo administrativo, habilidades técnicas, infraestructura y ambiente físico; considerar la prevalencia de sobrepeso, obesidad y diabetes en los estados y municipios del país; estar encaminados a cambiar hábitos y costumbres; promocionar la actividad física adicional a la impartida en los espacios educativos; y contar con mecanismos de vigilancia y evaluación de su cumplimiento.
Los senadores indicaron que el “etiquetado” correcto de alimentos procesados, la prohibición de publicidad en horarios infantiles y la instalación de bebederos de agua son medidas concretas que se han tomado recientemente y que fortalecerán la lucha contra el sobrepeso y la obesidad, la cual, estimaron, implica un largo camino para alejar paulatinamente a la población de las enfermedades que significan el 80 por ciento de los decesos y acercarla a mejores hábitos en beneficio de su salud.
“México es el país con el mayor número de niños con obesidad y sobrepeso, lo cual significa, según los expertos, que en un futuro no muy lejano habrá una generación de adultos cuya expectativa de vida rebase apenas los 30 años.
“Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012, los niños en edad escolar (de ambos sexos) de 5 a 11 años presentaron una prevalencia nacional combinada de sobrepeso y obesidad en 2012 de 34.4 por ciento; 19.8 por ciento para sobrepeso y 14.6 por ciento para obesidad”, precisaron.
Por ello, afirmaron que resulta trascendental, como parte de esta estrategia integral al combate del sobrepeso, la obesidad y la diabetes, buscar que las autoridades educativas aumenten, dependiendo de las necesidades de los estados y municipios, la actividad física en niños y adolescentes, generando, por un lado, mayor actividad en los centros educativos y, por otro, cambiando hábitos para que éstos adopten prácticas deportivas fuera de las escuelas.
Torres Peimbert y Romero Hicks indicaron que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, el 60 por ciento de la población en el mundo no realiza la actividad física recomendada para tener un cuerpo saludable.
Apuntaron que la misma organización señala que el sedentarismo causa 2 millones de muertes al año, siendo el cuarto factor de riesgo de mortalidad mundial, y motivo del 6 por ciento de los fallecimientos en la esfera global.
“El 27 por ciento de los casos de diabetes A la inactividad física se relaciona con 30 por ciento de cardiopatía isquémica, y entre el 21 por ciento y 25 por ciento de cáncer de colon y mama”, advirtieron.
En México, prosiguieron, alrededor del 90 por ciento de la población no hace actividad física, y según estudio realizado por el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública de la Cámara de Diputados reveló que en México el 80 por ciento de las mujeres y el 62.5 por ciento de los hombres no realizan ningún tipo de actividad deportiva.
Mencionaron que en la actualidad, los niños y las niñas realizan 70 por ciento menos actividad física en comparación a hace 30 años.
“En las principales ciudades de México el porcentaje de personas que realizan actividad física al menos una vez a la semana es de: 26 por ciento en Monterrey, 11 por ciento en Guadalajara y 20 por ciento en la Ciudad de México.
“Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012, 38.9 por ciento de los niños, las niñas y adolescentes de entre 10 y 14 años de edad mencionaron realizar una o dos actividades durante el ese año”, abundaron.
Por eso, finalizaron, desde educación en materia de hábitos alimenticios y nutrición, la integración de nuevas políticas de actividad física y movilidad para la población en general, hasta la erradicación del ambiente obesogénico y el incremento de la actividad física en los planteles educativos, debemos tomar todas las medidas necesarias para alcanzar un mismo objetivo:
Disminuir la tasa de muertes asociadas con la triada de enfermedades no transmisibles, que hoy suman más de 80 mil al año, y que significan un derroche de recursos públicos que, en un periodo no muy largo de tiempo, será incosteable para el Estado mexicano.
La iniciativa de Torres Peimbert y Romero Hicks se turnó a las comisiones unidas de Educación, de Juventud y Deporte y de Estudios Legislativos para su análisis y dictaminación.